El juego de entrevistar famosos es una potente herramienta para que los niños aprendan, se diviertan y dejen volar su imaginación. Se puede adaptar a distintos niveles, de manera que sirve tanto para los más pequeños de la casa como para jóvenes y adolescentes. Incluso los adultos podrían pasar un buen rato jugando a ser un personaje conocido por una tarde.

En primer lugar, alguien tiene que preparar las fichas de los famosos, escribiendo en un papel el nombre, la profesión, la edad y algún otro dato que pueda ser de interés. Los personajes elegidos deben ser conocidos por todos y pueden ser tanto de la realidad como de la ficción. De este modo, si se está jugando con niños de seis o siete años, las fichas podrían recoger a Bob Esponja, Messi o Einstein, por ejemplo, mientras que si todos los que participan son adolescentes o adultos, se podría escoger a Cristobal Colón, Pitágoras o Tom Hanks. Luego se doblan y se meten todos en una caja o un recipiente. Bailarines, futbolistas, científicos, médicos, actores, inventores, escritores, youtubers... ¡Las posibilidades son infinitas!

La idea es que la persona que se va a poner en la piel del famoso, tome uno de los papeles y lo lea para sí mismo. Ese será el famoso que deberá interpretar. Si se quiere, para hacerlo más ameno, la persona puede vestirse como el personaje o coger algún elemento que le represente para llevarlo durante la entrevista.

Los demás harán de periodistas y se colocarán frente a la silla o sillón donde estará el famoso, a la espera de saber quién tendrán delante. Aquel que encarne al personaje conocido, hará una entrada triunfal, siempre imitando cómo lo haría la persona a la que representa. Se sentará y hará una pequeña presentación, donde dirá su nombre, a qué se dedica y por qué está ahí para dar una rueda de prensa. Por ejemplo, si se tratase de un actor como Leonardo Di Caprio, podría decir que va a hacer una nueva película o en caso de que fuera un deportista como Fernando Alonso, podría salir a anunciar su vuelta a la Fórmula 1.

Los niños que hagan de periodistas comenzarán a formularle preguntas, todas las que quieran: divertidas, locas, personales… ¡Cualquier cosa es posible! El famoso irá contestando hasta que finalmente se despida de los presentes y se marche. Luego, se intercambiarán los papeles y uno de los que ha sido periodista, pasará a ser el famoso y a la inversa.

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