El documento, consensuado por las facultades de Medicina de Catalunya, la Dirección General de Universidades, la Conselleria de Salud de la Generalitat y colectivos profesionales, plantea una PAP con al menos dos pruebas complementarias, ha informado la UdL en un comunicado.

Se trata de una prueba que mida el razonamiento crítico, basada en escenarios del ámbito social y de las humanidades para captar competencias no cognitivas relacionadas con el profesionalismo y la orientación social y, otra que compute las habilidades interpersonales y los valores profesionales como la orientación al paciente, la colaboración profesional, actitud personal y valores éticos basada en el juicio de situaciones específicas.

El documento, según la UdL, propone que no se descarte una tercera prueba para evaluar más específicamente características de la personalidad como la resiliencia, la capacidad de superar la frustración y la gestión de la incertidumbre, evitando tests ya existentes "que en realidad pretenden discriminar patología mental".

Una vez se haya decidido formalmente la realización de la PAP, el documento apuesta por aprovechar los dos años que quedan para prepararla adecuadamente, para lo que plantea administrar la prueba a una muestra de estudiantes actuales de Medicina de los dos primeros cursos y facilitarla a una muestra a candidatas y candidatos voluntarios que se aplicaría en 2021.

"Con la aprobación de este documento se autoriza el inicio del proceso para que más adelante el Consejo interuniversitario de Catalunya pueda implantar este sistema a todas las universidades catalanas que tienen facultad de Medicina", ha explicado el vicerrector de Ordenación académica, Francisco Giné.