El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha acordado levantar la suspensión cautelar del plan parcial Armanello de Benidorm, que prevé la construcción de entre 16 y 20 rascacielos, con 3.800 viviendas, en un espacio de 680.000 metros cuadrados.

La resolución de la Audiencia de Alicante considerada también no probada la comisión de un delito de alteración de precios y estafa por parte de la sociedad Enrique Ortiz e Hijos en el proceso de adjudicación del citado plan.

Los hechos se remontan a junio de 2000, cuando la sociedad Enrique Ortiz e Hijos presentó un programa para la actuación integrada del plan, al que también optaron las firmas Urbanismo Mare Nostrum, S.L., Residencial L´Aigüera, S.L. y Gama 2000 Promociones, S.L.

En julio de 2001, Mare Nostrum desistió de su alternativa y apoyó la expuesta por Ortiz, que cinco días más tarde obtenía la adjudicación.

En marzo de 2004, Ortiz presentó en el consistorio benidormense un proyecto de urbanización, que suponía incrementar en 20 millones de euros el presupuesto aprobado.

Un mes más tarde comunicó a la corporación municipal que cedía la condición de agente urbanizador a una nueva entidad, Armanello Milenium, S.L., que se había creado en 2002 con la participación de Ortiz e Hijos y Mare Nostrum.

Esos movimientos llevaron a los propietarios de suelo a presentar una querella criminal contra Enrique Ortiz, entre otros constructores.

"No hay signos de ilegalidad o de maniobras fraudulentas en el mero hecho de que dos entidades licitadoras alcanzaran un acuerdo", indica la resolución de la Audiencia de Alicante.

Ante ese posicionamiento, medio año después, el TSJCV ha levantado la suspensión cautelar que pesaba sobre el plan.

Cambiará la imagen marítima de la ciudad

La Asociación de Promotores de Benidorm y la Marina Baixa ha elaborado un proyecto para relanzar la segunda línea marítima de la trama urbana de la ciudad, mediante la peatonalización y cambio de escena de varios puntos clave.

La propuesta, titulada "Plazas al mar", fue una de las iniciativas presentadas al concurso de ideas Benidorm 2050, organizado en el XII Foro Internacional de Turismo, y quedó finalista del I Premio Pedro Zaragoza.

El proyecto consiste en el "esponjamiento" del espacio para que "la segunda línea sea como la primera", según un portavoz del colectivo.

Para ello proponen crear unas "plazas" en varios puntos clave de la segunda línea, que se convertirán en "hitos". Esos espacios se restringirán al tráfico y se dotarán de vegetación, de bancos, fuentes y de una nueva imagen.

Las plazas que contempla el proyecto están situadas en las inmediaciones del Parque de Elche, la Plaza Triangular, el cruce de Mediterráneo con Europa y el Rincón de Loix.

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