La crisis económica también atenaza las cuentas del Ayuntamiento de Alicante. Los presupuestos municipales se recortarán en 38 millones de euros para el próximo año, cuando pasarán a ser de 217 millones de euros.

El Consistorio prepara un paquete de medidas para ajustarse el cinturón, como que los concejales «no se subirán el sueldo», según Juan Zaragoza, edil de Hacienda, aunque sus nóminas sí se actualizarán al incremento del Índice de Precios al Consumo (se prevé un 4,5%). Los grandes proyectos de inversión en infraestructuras quedarán fuera del tijeretazo presupuestario, por ser «compromisos», prometió Zaragoza.

Otra medida de contención es el descenso «en un 33%» de los gastos de protocolo, que sólo para Alcaldía este año se han llevado la cifra de 400.000 euros. Y para que la recesión afecte lo menos posible, suben varias tasas en 2009, como las basuras y los vados, en un 5%, o la del Impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos urbanos (plusvalía), en un 7,44%. También se encarecerá, en un 9,25%, la tasa de veladores que pagan los hosteleros.

No obstante, los comerciantes perjudicados por las obras del Tram en la avenida de la Estación o el Bulevar del Pla tendrán una reducción de cuotas del 90% los dos primeros años, así como una bonificación del 50% si renuevan sus establecimientos.

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