La mayoría de la gente se da de alta en Instagram y pasa sin pena ni gloria, más allá de que le siga la persona que le dio el consejo (o se puso pesado) de que se lo abriera. Pero Johnny Depp no es cualquiera y tras abrir una cuenta en esa red social, ha dado la campanada y en menos de 24 horas ronda ya los dos millones de seguidores. 

Y eso que las primeras imágenes del actor no son exactamente alegres. De hecho, en la descripción de la BIO el actor ha puesto: "Dramático ocasional". Y en su primer texto junto a las imágenes sólo un lacónico "aislamiento". 

Pero, eso sí, el actor está tramando algo, porque junto a las imágenes, en las que aparece en un lugar pedregoso y sombrío, como una bodega e iluminado con velas, anuncia: "Hola a todos... filmando algo para ti ahora... dame un minuto". 

Y ese algo era un vídeo de aspecto más bien siniestro, pero con un mensaje profundo. 

"La gente está enferma y luchando por respirar sin ningún tipo de cobertura médica. Muchos han muerto", recuerda el actor, que dice que antes nunca sintió la necesidad de tener Instagram. 

Depp asegura que ahora "es momento de ayudar a nuestra familia, a los demás y a nosotros mismos" y que aunque nos sintamos "con las manos atadas a la espalda", solo hay que "abrir bien los ojos" para ver oportunidades para ayudar. 

El intérprete aconseja que aprovechemos para estar cerca de nuestras familias, "en lugar de perder el tiempo" recreándonos en la desgracia. 

"Cuando mis hijos se hacían mayores y me decían que estaban aburridos siempre les contestaba 'aburrirse no está permitido'", rememora el actor, que da consejos sobre qué hacer con el tiempo libre. 

Además, el actor nos remite a una canción que grabó junto a un amigo, una versión de una canción de John Lennon, llamada Isolation. 

Tal es la relevancia del intérprete que incluso la cuenta oficial de Instagram respondía a la publicación, comentando: "¡Bienvenido a nuestro mágico mundo, Johnny!".