El presidente de la Federación de Organizaciones Andaluzas de Mayores, Martín Durán, ha indicado en un comunicado que su entidad tiene constancia de que ya se elevan a 16 los ancianos de este centro de personas mayores fallecidos después de haber resultado contagiados de Covid-19, mientras "el número de contagiados ni se sabe".

Además, ha criticado "la falta de información" que padecen los familiares de los ancianos residentes en ese centro y la "carencia de humanidad" por parte de la dirección del mismo. "Para tener una video llamada con sus familiares, al día de hoy sólo hay habilitado un teléfono y un horario de tarde de una hora y media para aproximadamente 130 residentes. Hay que apuntarse por lasmañanas para poder realizar la video llamada", critica la FOAM.

Además, señala el caso de la muerte de dos residentes "asintomáticas" cuando comenzaron a compartir habitación después de que una de ellas hubiese compartido antes su cuarto con una anciana que finalmente habría arrojado un resultado "positivo" en la prueba de coronavirus Covid-19.

"Afortunadamente, la relación de los médicos del SAS, que nodependen de la dirección del centro, con los familiares de losresidentes afectados no tiene nada que ver con estos métodos. Diariamente informan a los familiares de los residentes afectados de la situación de los mismos", expone por contra la FOAM, que acusa a los responsables de este geriátrico de un "cúmulo de despropósitos" a la hora de gestionar la crisis sociosanitaria derivada de la pandemia de coronavirus Covid-19.

La Fiscalía de Sevilla, en cualquier caso, ha incoado diligencias informativas en torno a este geriátrico y al centro de personas mayores Joaquín Rosillo de San Juan de Aznalfarache (Sevilla), donde la Junta de Andalucía ha confirmado la muerte de 24 de los ancianos contagiados, según indicaban a Europa Press fuentes del Ministerio Público.