Según han informado fuentes del Ayuntamiento de Valladolid en un comunicado recogido por Europa Press, las 320 denuncias suman las actas levantadas a viandantes como a conductores.

El Consistorio señala que durante estas cuatro jornadas "la inmensa mayoría de los ciudadanos que no se encontraban en casa sólo podían alegar la compra como justificación", y más aún el Jueves y Viernes Santo, cuando la mayoría de los supermercados permanecieron cerrados -solo algunos abrieron en la jornada del jueves. Por todo ello, han advertido de que "detectar el incumplimiento del estado de alarma era sencillo".

Así, el Jueves Santo se presentaron 57 denuncias, mientras que el viernes la cifra se elevó a 89, en muchos casos a personas que estaban paseando a pesar de que el estado de alarma prohíbe dicha práctica y a pesar de que esta actitud irresponsable implica multas de entre 601 y 30.000 euros.

El sábado, día en el que reabrían los mercados y superficies comerciales, repuntó la cifra de denuncias hasta llegar al centenar, la más alta de estas cuatro jornadas. Ese día se intensificaron los controles de tráfico en los que se dio el alto a 1.677 vehículos, lo que derivó en la denuncia a 19 conductores.

Finalmente este Domingo de Pascua fueron 74 denuncias (62 a peatones y 12 a conductores de vehículos que circulaban sin causa justificada).