Dos canciones únicamente. Es lo que le hizo falta al grupo Amaral para meterse al público donostiarra en el bolsillo. Un comienzo de concierto que dejó patente por qué han vendido millones de discos en su carrera.

Luces, cámara y acción.. .Después de una melodía musical sobrecogedora, se alzó el rojo telón y el conjunto salió a escena, con uno de sus temas más guerreros, Kamikaze. Voz y sobretodo mucha garra en el inicio del concierto.

Durante las más de dos horas de cada concierto, Eva Amaral, Juan Aguirre y su equipo de músicos interpretaron numerosos temas de todos sus trabajos discográficos. No faltaron a la cita "Mis amigos" "Toda la noche en la calle", "Revolución" o "Estrella de mar".

1.800 personas abarrotaron el martes y el miércoles por la noche el Kursaal y aplaudieron y codearon las canciones del grupo.

El escenario, muy bien decorado era un lugar idóneo para el concierto, creaba intimidad y daba oportunidades para la improvisación. Amaral y y Juan lo vieron claro y se acercaron a las butacas del público en más de una ocasión.

Amaral, la gata, puso su voz, su grupo la fuerza y las luces hicieron que fuera un espectáculo.

"Sin ti no soy nada", una de las canciones más conocidas del grupo, puso el broche final a esta hermosa cita.

No era la primera vez que pisaban un escenario en San Sebastián. Además, las entradas estaban agotadas desde hace días, y muchos donostiarras se quedaron con más ganas de Amaral... Tranquilos, seguro que vuelven con su gato negro y dragón rojo.

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