Para encontrar las "claves del amor urbano" hay que buscar en las zonas más discretas de las ciudades. Los callejones son el lugar preferido por los jóvenes para "dar rienta suelta a sus prácticas amorosas", según un estudio elaborado por la Universidad de Granada, en colaboración con la Veracruzana de México.

Esta pionera investigación, elaborada por el doctor Genaro Aguirre, analiza por primera vez la forma en que los "jóvenes hacen suyos los espacios públicos para la exploración erótico-amorosa sobre sus propias fronteras corporales e imaginativas", describe Aguirre.

El estudio realiza una "cartografía del amor urbano" ocupando el primer lugar los callejones, seguidos de las playas y los parques como espacios elegidos por "las parejas de enamorados" para practicar sexo.

Es la conclusión a la que llega el investigador, dirigido por los profesores Antolín Granados y Gunther Dietz de la UGR, tras escrutar los resultados de las encuestas realizadas a 156 jóvenes mexicanos con edades comprendidas entre los 17 y los 28 años y cuyos datos "son extrapolables a cualquier país del ámbito iberoamericano, incluida España".

Erótico-sexual

Según Aguirre, los jóvenes "no sólo se apropian de los lugares públicos para re-significarlos, sino que les asignan un valor simbólico cuando la emoción se desborda y traspasa los grados permisibles, alcanzando un grado erótico-sexual".

Este uso de los espacios públicos se realiza con independencia de las clases sociales, subraya la investigación, que sitúa a las canciones románticas como los principales "agentes de mediación amorosa" preferidos por los jóvenes, seguidas de las películas y, "muy de lejos, la poesía".