Los Mossos d'Esquadra han identificado y denunciado un hombre que había realizado, durante las últimas semanas, hasta 36 vuelos ilegales con drones por encima de la ciudad de Barcelona. El hombre utilizaba el dron de forma irregular y, además, de manera muy peligrosa, puesto que en la mayoría de vuelos superaba los 500 metros de altura, una cota muy superior a la legalmente establecida por estas aeronaves (120 metros). 

Los agentes pudieron constatar que en algún caso la altura lograda fue superior a la de algunas aeronaves tripuladas. Así mismo, el denunciado realizaba estos vuelos dentro del espacio aéreo controlado del aeropuerto del Prat y muy próximo a helipuertos utilizados por servicios de emergencia.

Estos vuelos se intensificaron notablemente en el momento que se decretó el estado de alarma y el consecuente confinamiento. Los llevaba a cabo tanto de día como al atardecer, e iba incrementando considerablemente no solo la altura, sino también la distancia. El piloto grababa imágenes de la ciudad de Barcelona con el objetivo de publicarlas en sus redes sociales.

Hasta 225.000 euros de multa

Después de haber identificado el piloto y el punto desde donde elevaba el dron, los Mossos d'Esquadra lo han denunciado por varios incumplimientos de la Ley de Seguridad Aérea y han trasladado esta denuncia a la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), órgano responsable de la generación del expediente sancionador. Las sanciones por hacer volar drones recreativos de forma ilegal pueden llegar, en los casos más graves, a los 225.000 euros.

La policía autonómica recuerda que está prohibido hacer volar cualquier dron por usuarios recreativos en la ciudad de Barcelona y su área metropolitana, independientemente del peso y altura máxima de ascenso. En el caso de drones profesionales, se requiere entre otros requisitos, la autorización expresa de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea y la coordinación con el gestor del espacio aéreo.

Finalmente, hay que recordar que en la situación actual es responsabilidad de toda la ciudadanía evitar acciones y conductas que posen en riesgo a otras personas. En este sentido, y dentro del ámbito de los drones, las autoridades están especialmente atentas para identificar a otras personas que realizan conductas similares.