Según ha informado el instituto armado, al ser identificado, el hombre alegó que había salido a hacer la compra y que ya regresaba a su domicilio.
La Guardia Civil ha explicado que, para asegurar su vuelta, los agentes le acompañaron hasta su supuesto domicilio, donde una familia que allí vivía se sorprendió y manifestó que no conocía al denunciado.
En ese momento, el denunciado reconoció que en realidad vive a 10 kilómetros de donde fue identificado y que, a pesar de conocer la obligación de quedarse en casa, suele salir a practicar este deporte cada domingo.
Tras ser denunciado, la Guardia Civil le escoltó hasta que finalmente llegó a su verdadero domicilio.
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