En la semana más dura por la crisis del coronavirus, el Gobierno da un paso adelante. El Ejecutivo de Sánchez ha reaccionado y ha anunciado este miércoles la compra a China de 432 millones en material sanitario. Así lo anunció el ministro de Sanidad, Salvador Illa, en rueda de prensa.

Hay acuerdo con dos provedores, que suministrarán 950 equipos entre abril y junio. Y con dos proveedores 11 millones de guantes, suministados durante cuatro semanas. "Insisto: 432 millones de euros de contrato cerrados, de epis, más de 550 millones de mascarillas, 5,5 millones de test rápidos, 950 respiradores y guantes, 11 millones", reiteró. Fue el propio Illa quien desglosó los materiales en su comparecencia.

"El suministro será semanal, de forma escalonada. A finales de esta semana llegará el primer suministro, importante", comentó el ministro. Adicionalmente, el Gobierno activa la fabricación de estas categorías de productos. Illa además apeló a los ejercicios de solidaridad y unión que se están haciendo: "Quiero agraceder el esfuerzo de las empresas españolas con capacidad para fabricarlos y el del Ministerio de Industria. Es el momento de la solidaridad con Madrid. Hoy Madrid, mañana con las comunidades que lo requieran". 

Y es que adicionalmente el Gobierno está activando "la fabricación nacional de todos estos productos". Asimismo, Illa quiso salir al paso de las informaciones, según él, falsas. "No ha habido confiscación ni retención de materiales en las aduanas. Hay que acabar con estos bulos. El Gobierno de España apoya todas las acciones de compra que hagan las comunidades", concluyó.

Como cabeza visible del comité de seguimiento, Salvador Illa quiso también reivindicar el papel del propio Pedro Sánchez. "La presidenta de la Comisión Europea ha puesto en valor las consideraciones de España para articular un plan Marshall para Europa", recordó.

Desde Sanidad siguen avisando de que la situación "sigue siendo muy complicada" y reconocen que la cifras son elevadas aunque, como ya sostuvo Fernando Simón, es muy probable que el pico esté cerca. Eso sí, el asunto del material sanitario acaparó casi toda la comparecencia del ministro. "Todas las comunidades autónomas que han pedido ayuda al Gobierno de España, seguirán contando con esa ayuda", esgrimió.

Evita hacer autocrítica sobre los eventos masivos

Salvador Illa ha evitado responder sobre si fue un error o no autorizar las manifestaciones del 8 de marzo, los congresos de partidos políticos como Vox o actos deportivos y se ha centrado en situar el inicio de la pandemia en la última semana de febrero. Según ha dicho, en esa fecha fue cuando sitúan el "contagio importante" en la Comunidad de Madrid.

Ha argumentado en este sentido, que hasta que se tiene la notificación de los casos pasa un mínimo de entre ocho y diez días. Ese, ha precisado, es el tiempo necesario para que aparezcan los síntomas, entre cinco y seis días, y para que los afectados vayan al médico, les hagan el test y se comunique al Gobierno.

"Lo que detectamos la tarde noche del día 8 de marzo quiere decir que se produjo ocho o diez días antes, estimamos que hacia la última semana de febrero es cuando se produjo el contagio importante en algunas partes del territorio español, en concreto, en la Comunidad de Madrid", ha precisado.