El silencio que ahoga la ciudad de Madrid es interrumpida por las máquinas taladradoras. Pese al parón generalizado de la actividad, los obreros siguen trabajando estos días a pie de calle. El teletrabajo no es una opción para ellos, pero hay quienes opinan que deberían tener alternativas a las que acogerse.

El uso frecuente de furgonetas para los trabajadores; las labores propias en la zona de obras y el transporte del material, que impiden mantener las distancias de seguridad; y el contacto (ya sea en los desplazamientos en transporte público o en las cercanías de las obras) de dichos trabajadores con personas ajenas a la propia obra "no hace más que incrementar las posibilidades de otros nuevos contagios", apunta el gobierno municipal.

Ante esta cuestión de salud pública, El Ayuntamiento de Madrid- una de las voces que opina que deben acogerse a alternativas- ha remitido este viernes un informe a la Comunidad de Madrid para que ésta, a su vez, proponga al Estado, que es el que tiene las competencias, la paralización de las obras que actualmente se están realizando en la ciudad, informan desde Cibeles.

El alcalde Martínez-Almeida estima, acorde al informe realizado por Madrid Salud, que “dada la situación de la pandemia en la ciudad de Madrid, se considera imprescindible la paralización de las obras, salvo aquellas que tengan un carácter de urgencia, fugas de agua o riesgo de colapso de la propia edificación”, apuntan las fuentes municipales.

Esta medida viene precedida de un protocolo de colaboración que el Ayuntamiento ha redactado esta misma semana. La inspección será llevad por la Policía Municipal que deberá verificar la adopción de medidas en materia de seguridad y salud en los centros de trabajo de las obras de reforma, rehabilitación y acondicionamiento que se están desarrollando en edificios de viviendas de la ciudad, ante la situación de emergencia sanitaria y de salud como consecuencia del coronavirus.

Así, mientras Almeida espera la respuesta a su carta, el Ayuntamiento inspeccionará las obras de la ciudad para velar por que cumplan con todas las medidas de seguridad frente al coronavirus y, si se detectan incumplimientos, se instará al promotor o responsable de la obra para que la paralice.