Las personas que pueden distinguir mejor los sonidos de su propia lengua son las que tienen más facilidades por aprender otro idioma, según un estudio elaborado por el Grupo de Investigación en Neurociència Cognitiva, vinculado al Parc Científic de Barcelona.

Se han comparado personas capaces de percibir una segunda lengua como un nativo con otras que tienen muchas dificultades por hacerlo, y han visto que los primeros son también mejores a la hora de distinguir los sonidos de su propia lengua.

En el estudio, se evaluó la capacidad perceptiva de 126 estudiantes universitarios nacidos en el área metropolitana de Barcelona de familias monolingües castellanas, que aprendieron el catalán cuando empezaron la escolarización.

Esta población es idónea porque el catalán posee algunas vocales que son difíciles de percibir para la mayor parte de la población castellanoparlante, y de este grupo, se seleccionaron 31 individuos en dos grupos, los mejores y peores perceptores de los sonidos de la segunda lengua, que era el catalán. Después se midió la capacidad auditiva lingüística con vocales de la lengua materna (castellano) y del finlandés.