Unidas Podemos ha conseguido que el Gobierno ponga en marcha un programa mucho más ambicioso de lo que planteaba el sector más ortodoxo del PSOE, liderado por la ministra de Economía, Nadia Calviño, a cuyo enfoque se oponían incluso algunos dirigentes socialistas. Pero lo cierto es que la formación morada y su líder, el vicepresidente segundo Pablo Iglesias, tampoco han obtenido de momento todas las medidas de inversión pública que reclamaron en los últimos días, tanto en el Consejo de Ministros como públicamente.
La reunión que mantuvo este martes el Consejo de Ministros fue el último episodio del pulso que han mantenido las dos almas del Ejecutivo en los últimos días en relación al plan económico para la crisis del coronavirus. Tras el anuncio de las medidas, Iglesias se felicitó por la aprobación, "tras mucho trabajo", de un "escudo social" para "proteger a la gente trabajadora, autónomos, empresas y familias".
Pero lo cierto es que en el plan puesto en marcha no figuran algunas de las medidas señeras de los morados. Para empezar, Unidas Podemos apostaba por que la moratoria decretada para el pago de las hipotecas de las familias en situación de necesidad se extendiera también a los alquileres, pero los inquilinos, al menos con las medidas aprobadas este martes, no tendrán el mismo colchón que los propietarios si son despedidos.
Tampoco se incluye en el decreto presentado la prestación prometida hace días por el Gobierno y destinada a los trabajadores que se acojan al nuevo derecho de reducir su jornada hasta el 100% para cuidar a familiares de hasta segundo grado. Es decir: el trabajador podrá reducir su jornada, sí, pero perderá sueldo en el mismo porcentaje en el que recorte horas de trabajo. Si decide no ir a trabajar, no perderá su puesto, pero sí su salario, y por el momento ninguna prestación social se lo cubrirá.
Por el contrario, Unidas Podemos sí ha conseguido que se flexibilizase el gasto de los ayuntamientos, se garantizasen los suministros básicos a familias vulnerables o se reforzaran los servicios sociales para hacer frente a las necesidades derivadas de la pandemia de coronavirus.
Tras un comienzo de la convivencia relativamente tranquilo, la crisis del coronavirus ha revelado las grandes diferencias que existen en política económica entre Unidas Podemos y el ala más ortodoxa del PSOE. Y este pulso, conforme avance la crisis económica, amenaza con mantenerse. Iglesias, este martes, ya avisó de que el Gobierno trabaja para aprobar "más medidas". Y, si estas conllevan un aumento del gasto, parece complicado que no provoquen nuevas tensiones.
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