Recordemos que CGT avisaba este pasado lunes de que las plantillas de los centros de trabajo de Sevilla del sector de los teleservicios afrontan un "grave riesgo para la salud", dada la "inobservancia" de las empresas del sector respecto a las medidas preventivas promovidas contra la propagación del coronavirus Covid-19, mencionando expresamente a las empresas Konecta, Sitel, Teleperformance y Transcom, que suman miles de trabajadores en la provincia.

En ese sentido, Fernando Soriano ha explicado que este pasado lunes, la Policía Local de Bollullos cursó ya una primera inspección a las instalaciones con las que cuenta Konecta en dicho municipio, en el parque empresarial PIBO y la Carretera Prado de la Torre, toda vez que ambos centros de trabajo sumarían más de 1.500 trabajadores.

Durante la inspección, según el alcalde de Bollullos, habría quedado de relieve que la empresa incurría en "graves incumplimientos" de las medidas preventivas promovidas contra la expansión del coronavirus Covid-19, que suma ya 11.178 contagios en España, 683 de ellos en Andalucía y cien en la provincia de Sevilla, motivando la implantación del estado de alarma con toda una batería de restricciones a la movilidad y a la actividad económica.

Según el alcalde, "resulta absurdo confinar en los hogares" a los trabajadores de esta empresa, si los mismos se ven abocados a trabajar en centros donde no se respeta "la distancia mínima" entre personas para evitar los contagios ni hay elementos de protección individual como guantes, mascarillas o geles desinfectantes. "Era un foco de contagios", ha aseverado.

Ante esta inspección, la empresa habría prometido tomar "medidas" para corregir la situación, si bien en una nueva inspección cursada este martes los trabajadores afrontaban su jornada laboral "poco más o menos igual" que el lunes. Dado el caso, según el alcalde de Bollullos, a las 16,30 horas los agentes de la Policía Local han desalojado los dos centros de trabajo, el del parque empresarial PIBO y la Carretera Prado de la Torre.