En una situación de estado de la alarma en la que se han restringido los movimientos y se insta a la ciudadanía a no salir de casa, las personas sin hogar son especialmente vulnerables. Los ONG vienen reclamando que se les preste una especial atención y se dispongan los medios necesarios para minimizar su contagio. Por ello el Gobierno ha anunciado que va a realizar un refuerzo de los Servicios Sociales para asistirlas ante la crisis del coronavirus. 

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Moncloa reconoce que la asistencia social se verá seguramente desbordada en los próximos días por una sobrecarga de trabajo por lo que se recurrirá a la cooperación de las Fuerzas Armadas. "Los profesionales de protección civil, las Fuerzas Armadas y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, acompañados del personal de los Servicios Sociales, participarán en el seguimiento diario de las personas sin hogar, el refuerzo de los centros sociales, el reparto de alimentación, la dotación de los comedores sociales y la habilitación de los espacios necesarios", afirma.

Los Servicios Sociales constituirán unidades que diariamente entreguen un kit de higiene, alimentación y bebida a estas personas, les expliquen medidas de prevención, les midan la temperatura y las orienten en caso necesario. Se habilitarán además comedores sociales para dar comida para llevar.

El Ejecutivo prevé también reforzar los centros para este colectivo con sanitarios que doten a los atendidos de equipos de protección, controlen la salud del personal y de los residentes, tomen medidas preventivas, identifiquen posibles contagios y aíslen o deriven a otro centro a posibles infectados. Se reforzarán igualmente los servicios de limpieza y desinfección, tanto para el propio centro como para ropa y enseres de residentes.

Entre las medidas a adoptar se habilitarán espacios amplios para alojar, alimentar, garantizar la higiene y atender a personas sin hogar, con profesionales sociales y sanitarios, con posibilidad de zona de aislamiento para personas afectadas. El objetivo es reducir así el aforo y las largas colas para minimizar el riesgo de contagio.

Colaboración de un empresario

En Madrid, el delegado del Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, anunció este domingo que el Ayuntamiento iba a trasladar a los solicitantes de asilo y a las personas sin hogar sin síntomas de coronavirus a un hotel en Arganda del Rey y a una pensión en la capital, donde podrán realizar el aislamiento decretado por el Gobierno. 

El establecimiento de Arganda, cesión altruista de un empresario, cuenta con 56 plazas ampliables hasta 110 y la pensión con 70, de las cuales ya se utilizan 40. Los derivados eran residentes tanto de los módulos de Villa de Vallecas como del centro Juan Luis Vives.

Estas medidas se suman a la ya anunciada ampliación de la campaña del frío hasta el 31 de mayo, que permitirá contar con 479 plazas y 30 de centros de día mientras se supera lo peor de la crisis sanitaria. El Ayuntamiento ha implantado además un protocolo para que los centros de la red municipal adapten el establecimiento de espacios de aislamiento, la suspensión de cualquier visita o actividad grupal no imprescindible y el seguimiento a quienes presenten síntomas.

“Estamos trabajando en nuevas iniciativas destinadas a evitar las peores consecuencias que la crisis puede tener para las personas sin hogar, que anunciaremos lo antes posible”, adelantó Aniorte, quien se mostró confiado “en que las medidas tomadas por el Gobierno de España sirvan para mejorar el suministro de materiales necesarios para la protección de los profesionales que trabajan en los centros”.