El pulso dentro del Gobierno por el alcance que deben tener las medidas económicas para acompañar la declaración del estado de alarma se mantiene. El Consejo de Ministros se reunirá de nuevo este martes para aprobar el plan económico que no pudo promulgar el sábado por las discrepancias entre Unidas Podemos y algunos ministros del PSOE en relación, precisamente, con estas medidas. Y este domingo, la formación morada redobló la presión para adoptar un programa potente de estímulos.

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Tras un comienzo de la convivencia relativamente tranquilo, la crisis del coronavirus ha revelado las grandes diferencias que existen en política económica entre Unidas Podemos y el ala más ortodoxa del PSOE y ha tensado las costuras de la coalición. En mitad de esta situación de emergencia no parece haber riesgo de ruptura de la alianza. Pero las medidas que se adopten marcarán el devenir de la coalición y la relación entre los socios.

A grandes rasgos, Unidas Podemos (capitaneado por el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias) apuesta por un plan amplio de ayudas públicas que contemple una fuerte inversión estatal para sostener la economía y ayudar a las familias, especialmente las más vulnerables. Y, frente a los ministros morados, dirigentes como la ministra de Economía, Nadia Calviño, insisten en vigilar que no se desboque el gasto público en unos tiempos de incertidumbre económica como los que vienen.

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No obstante, la crisis no puede entenderse como un choque circunscrito a las fronteras de los partidos. Varios ministros socialistas, entre los cuáles se cuentan el de Transportes, José Luis Ábalos, o el de Seguridad Social, José Luis Escrivá (este último señalado habitualmente como uno de los guardianes de la ortodoxia económica del Ejecutivo) están más cerca de las tesis de Iglesias que de las de Calviño.

Fuentes de Unidas Podemos insisten en que, más allá de las diferencias ideológicas, lo que se pretende es evitar ciertas políticas que se adoptaron para hacer frente a la crisis económica de 2008 y que "se ha demostrado que no funcionaron". Será el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien tenga la última palabra sobre el diseño del paquete económico. Pero, en un movimiento de presión, varios dirigentes de primer orden de Unidas Podemos se pronunciaron públicamente este domingo.

"Un fuerte impulso de la inversión pública"

Es el caso de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que afirmó que el Gobierno debe tener dos objetivos: "Evitar despidos y garantizar ingresos mientras dure la emergencia". "Esta emergencia debe ser un paréntesis temporal en la actividad y no una nueva crisis para las mayorías. Las medidas que tenemos listas están acordadas con los agentes sociales y darán cobertura y seguridad a trabajadores, autónomos y pymes", prometió Díaz.

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El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, fue más allá y señaló que "todo el mundo ha aprendido de los terribles errores cometidos en la crisis de 2008, y hoy hasta Angela Merkel sabe que no se sale de las crisis recortando sino con un fuerte impulso de la inversión pública". "Por eso la UE habla hoy de relajar los objetivos de déficit", argumentó.

"Hay que proteger a las familias, a las empresas y a la economía en general de una recesión como la de 2008", insistió Echenique, que planteó tanto ayudas de emergencia para "familias, autónomos y pymes" como "fuertes paquetes de inversión pública en sectores estratégicos" cuando se haya controlado la pandemia. "Si somos decididos y valientes [...] España puede dar una lección al mundo de lucha contra la epidemia, de funcionamiento de la sanidad, de protección de la economía familiar y de rebote económico", señaló.

Moratoria de hipotecas y alquileres y garantía de suministros

Pero, ¿cuáles son estas medidas que propone Unidas Podemos? Según enumeró en Twitter el secretario general del PCE y diputado morado, Enrique Santiago, abarcan ámbitos como la vivienda, el mercado laboral y la energía, y buscan "evitar por todos los medios que la crisis sanitaria se convierta en crisis económica y social". "El Estado tiene recursos suficientes para evitarlo", asegura el dirigente.

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Unidas Podemos defiende decretar una moratoria del pago de hipotecas y alquileres que permita evitar estas cuotas a las "familias que vean reducidos sus ingresos, por perdida o reducción de empleo o caída de la actividad económica", explicó Santiago. Esa medida debería complementarse, según pide la formación morada, garantizando "los suministros básicos a las familias con problemas: agua, gas, luz y alimentación y unos ingresos mínimos a quien los necesite".

Además, Unidas Podemos defiende que el Gobierno apruebe partidas de financiación extra para "servicios esenciales" como "sanidad, servicios sociales, alimentación comunicación, limpieza" o "logística", y también cree que el Ejecutivo debe "garantizar los recursos" de ayuntamientos y ONG para evitar que dependientes, discapacitados y mayores se queden sin asistencia durante la emergencia.

En el ámbito laboral, la formación morada pide facilitar los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) para que las empresas puedan despedir temporalmente a sus trabajadores para reducir gastos y evitar cerrar, pero exige que esa medida vaya acompañada de una "prestación a los trabajadores afectados", según señaló Santiago. Y, además, Unidas Podemos propone "ayudas y apoyo en el pago de cotizaciones sociales a empresas que mantengan el empleo, utilizando el ICO para ello".