Un total de siete cruceros y 11.500 pasajeros se quedarán sin poder atracar en el Puerto de Valencia durante las próximas dos semanas, después de que el Gobierno central haya prohibido la entrada de buques de pasaje procedentes de Italia y de cruceros de cualquier origen con destino a puertos españoles como medida excepcional para limitar la propagación y el contagio por el Covid-19. Mientras, los trabajos de mercancías siguen con "normalidad absoluta".

El primero en llegar iba a ser el crucero 'Mein Schiff 4', que lo iba a hacer a lo largo del día del viernes 13 de marzo. El resto tenían prevista su llegada a partir del lunes de la semana siguiente, pero van a tener que buscarse una ruta alternativa ante la negativa valenciana.

Además, la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) ha informado sobre las medidas adoptadas en sus instalaciones para evitar la propagación del coronavirus. En materia de higiene, se dispondrá de geles antisépticos en mostradores de atención al público, casetas de control de accesos, vehículos compartidos, etc. 

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Asimismo, se dotarán los botiquines de los coches de la Policía Portuaria con mascarillas cuyo uso será para situaciones puntuales cuando tenga que actuar en contacto con personas, sin poder mantener la distancia de seguridad, según recomienda el Ministerio de Sanidad. También se extremará la limpieza general de zonas comunes especialmente las zonas de frecuente y múltiple contacto.

En los servicios de atención al público se priorizará la vía telefónica y telemática. Para el caso de atención presencial, se establecerán, si fuese necesario, los turnos imprescindibles para garantizar la prestación del servicio. En la medida de lo posible se evitarán las reuniones de trabajo, disponiéndose en todo caso la suspensión de aquellas que impliquen desplazamientos a otra localidad y se fomentará el uso de elementos telemáticos disponibles.

Se suspende la organización de cursos y actividades formativas de carácter presencial, se pospone la celebración de pruebas selectivas y los viajes deben ser aprobados previamente y en todo caso por la Dirección General. Se recomienda también posponer todos aquellos viajes de trabajo que no sean imprescindibles para la normal prestación de servicios esenciales.

Además, se promoverá la flexibilidad horaria y el teletrabajo especialmente para aquellos trabajadores con cargas familiares. Hasta nuevo aviso, se cierra el polideportivo, el Hogar del Jubilado y el servicio de cafetería-comedor subcontratado y dada la situación excepcional, los becarios no irán a trabajar.