Test exprés de coronavirus para el Gobierno... y quejas ciudadanas por la dificultad para tener un diagnóstico

Un médico recoge una muestra de una mujer para realizarle la prueba del coronavirus Covid-19 en la provincia china de Shandong.
Un médico recoge una muestra de una mujer para realizarle la prueba del coronavirus Covid-19 en la provincia china de Shandong.
EFE
Un médico recoge una muestra de una mujer para realizarle la prueba del coronavirus Covid-19 en la provincia china de Shandong.

Todos los miembros del Gobierno serán sometidos este jueves a una prueba para detectar si, como la ministra de Igualdad, también han contraído el coronavirus. Los test se les realizarán solo un día después de que Irene Montero diera positivo y su pareja y vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, empezara a observar cuarentena. 

La gestión de la crisis del coronavirus está en manos del Gobierno, que debe despejar rápidamente las dudas sobre su estado de salud en relación a la pandemia. Más aún cuando el presidente, Pedro Sánchez, y otros vicepresidentes y ministros han estado en contacto físico hasta este mismo miércoles, también con Iglesias, que permanece en cuarentena. 

Más allá de los responsables políticos sobre los que recae tomar decisiones y medidas en esta emergencia sanitaria, arrecian las quejas de los ciudadanos por las dificultades para ser sometidos al test, incluso presentando síntomas como fiebre, tos y dolor de garganta.

El descontento por el colapso de las líneas telefónicas a disposición de los ciudadanos para explicar síntomas y pedir la prueba es notorio en los últimos días en todo tipo de conversaciones y en las redes sociales. También son frecuentes los casos en los que, aún teniendo síntomas de coronavirus que de momento Moncloa no quiere precisar si presenta algún otro miembro del Gobierno, se deniega el test.

Fiebre, tos y dolor de garganta

Es el caso de David, un madrileño de 42 años, que presentó fiebre, tos y dolor de garganta entre el viernes de la semana pasada y este lunes. Tras llamar insistentemente al teléfono para ser atendido a distancia en la Comunidad de Madrid, el martes decidió acudir a su centro médico. La fiebre habría remitido, pero le negaron la prueba porque -dos semanas después de que la pandemia llegara a España- dijo que no había estado en contacto ni con ciudadanos italianos o chinos. “Dije que no y me mandaron para casa”, explica.

En casa está también Susana, una sevillana afincada en Madrid, que decidió tomarse la lucha del coronavirus por su mano, también debido a que no consiguió contactar con el teléfono de asistencia. Llamó repetidas veces cuando vio que tenía fiebre. Al no obtener respuesta, decidió aislarse en casa y tomar paracetamol.

Dani, otro madrileño, también se ha quedado sin ser diagnosticado por coronavirus, a pesar de que presentaba tos, cansancio y fiebre. Por teléfono le dijeron que “no era suficiente”, dado que no tenía mucosidad ni había estado en zonas de riesgo dentro de la Comunidad de Madrid, como Torrejón.

Ana Pastor, cuatro días después

Según explicó ella misma en Twitter, a la vicepresidenta del Congreso, Ana Pastor, se le practicó el test en el que dio positivo de coronavirus cuatro días después de empezar a tener fiebre, el sábado de la semana pasada. Según explicó el periodista de RNE David Fernández, él lleva ocho días con fiebre sin que se considere motivo suficiente para hacerle la prueba.

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