Se priorizará una serie de programas de atención que fomenten la autonomía personal, el envejecimiento activo en el propio domicilio, el impulso del entorno familiar y comunitario, el empoderamiento, la lucha contra la soledad y las mejoras de los servicios sociales.

El plan piloto tiene que permitir analizar, explorar y anticipar la adaptación de las políticas públicas para atender al incremento del envejecimiento catalán.

Terra Alta ha sido escogida para esta prueba piloto por su elevada tasa de envejecimiento, que se sitúa muy por encima de la media de Catalunya: un 29,3% de la población tiene más de 64 años, en comparación con la media del 16,8% en toda la comunidad.

El conseller de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat, Chakir el Homrani, ha destacado la necesidad de "crear un sistema de protección social que acompañe en el proceso de envejecimiento, capaz de atender a la diversidad de situaciones que presenta".

También ha subrayado la importancia de "atender antes para no tener que atender después en las situaciones de dependencia más acusadas", y que esto debe hacerse desde la proximidad, ha dicho.