PSOE y Podemos han adelantado a este viernes el cierre de la crisis que ha vivido la coalición esta semana con motivo de la ley de Libertad Sexual y han acordado mantener un "diálogo constante" para evitar nuevos encontronazos futuros. Además, han llamado a la movilización para este domingo.
La pasada semana ha sido de malas noticias para la coalición de Gobierno que forman PSOE y Unidas Podemos. Tras unos inicios dulces, los roces comenzaron a finales de febrero y en la primera semana de marzo se han intensificado hasta prácticamente producirse un lío diario, por lo que los socios han decidido convocar la mesa de seguimiento del pacto para el próximo jueves.
El encontronazo más grave, ya zanjado, ha sido a raíz de la ley de libertades sexuales promovida por el Ministerio de Igualdad de Irene Montero. Pero el caso Couso, la investigación de la Fiscalía suiza a la fortuna del rey Juan Carlos o la descoordinación de los ministerios a la hora de afrontar la lucha contra el coronavirus han jalonado una semana de tensión en el Gobierno.
De ahí que el jueves se vaya a reunir la mesa de seguimiento PSOE-Unidas Podemos, cuyos encuentros no se celebran periódicamente, sino cuando los socios consideran que son necesarios. Aunque lo cierto es que, más allá del orden del día concreto en el que se tratarán los roces, la mesa debe servir sobre todo para escenificar que las aguas vuelven a su cauce.
El Gobierno quiere combatir la mala imagen ofrecida en los últimos días a tenor de sus desencuentros y hacer ver que ha recuperado la sintonía de las primeras semanas. Y a ello ayudará que, según ambos sectores del Gobierno, la relación entre el presidente Pedro Sánchez y el vicepresidente segundo Pablo Iglesias no se ha resentido.
De todos los choques de la semana pasada, las fuentes consultadas coinciden en señalar a una perdedora: la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, a la que en varios sectores del Ejecutivo se considera la responsable de los encontronazos en lo relativo a la ley de libertades sexuales y, sobre todo, de que se hayan hecho públicos. Calvo ha salido debilitada de los choques no solo por haberse puesto en contra a Unidas Podemos, sino porque algunos ministros socialistas e incluso Sánchez tampoco habrían visto con buenos ojos sus movimientos en los últimos días.
La ley del 'sí es sí', foco de la polémica
El detonante de la crisis en el Gobierno fue la filtración, el lunes pasado, de las diferencias entre Calvo y el Ministerio de Justicia, por un lado, e Irene Montero, por el otro, en relación a la redacción del anteproyecto de ley de libertades sexuales. Igualdad ya había chocado con Justicia a tenor de este anteproyecto hace unas semanas, y entonces terminó ganando la partida al conseguir que Sánchez se comprometiera a iniciar la tramitación de la norma antes del 8 de marzo.
Pero en Unidas Podemos cunde la sensación de que Calvo (ex ministra de Igualdad y con diferencias ideológicas en este campo con Montero) trató –infructuosamente– de torpedear su puesta en marcha filtrando las desavenencias, y la crisis solo se agravó cuando Iglesias achacó estas "excusas técnicas" a la presencia de "mucho machista frustrado" en el Gobierno, lo que se interpretó como un dardo al ministro de Justicia, Juan Carlos Campo.
El segundo episodio de tensión que ha afectado a PSOE y Unidas Podemos ha venido a raíz de la decisión de la Abogacía del Estado de recurrir la indemnización impuesta por la Audiencia Nacional al Estado por dejar sola en su contencioso legal con EE UU a la familia del cámara José Couso, asesinado por tropas de ese país en la Guerra de Irak en 2003.
Unidas Podemos ha tratado de no polemizar demasiado con asuntos espinosos como la política socialista con respecto al Sáhara o la tibieza de Interior con respecto a la posibilidad de llevar a cabo devoluciones en caliente, aunque los desacuerdos sobre estos temas siguen latentes. Pero en esta ocasión manifestó claramente "todo su apoyo a la familia Couso" y expresó su discrepancia con "el criterio" de la Abogacía, mientras la parte socialista del Gobierno defiende el recurso porque la "protección" a la que tienen derecho los ciudadanos por parte del Estado "tiene un límite".
La investigación al rey y la guía del coronavirus
La petición de Unidas Podemos de que el Congreso abra una comisión de investigación sobre las actividades y la fortuna del rey Juan Carlos, a raíz de las indagaciones de la Fiscalía suiza sobre el monarca que se han hecho públicas en los últimos días, amenaza con convertirse en otro foco de tensión. El PSOE ya ha dejado claro que no apoyará que se abra esta comisión, y sin su apoyo, será rechazada.
Y el jueves se produjo la última fricción, ya que Moncloa tuvo que recordar que es Sanidad quien está al mando de la gestión de la crisis del coronavirus unas horas después de que el Ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz publicase una guía al respecto.
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