El Ayuntamiento explica en un comunicado que esa sustitución de los plátanos de sombra obedece a los resultados de un completo procedimiento de revisión del estado de los ejemplares, que constataban un grave riesgo de accidente ante el deficitario anclaje de los árboles (escasa profundidad de las raíces) y las grandes oquedades en los troncos. Por su parte, las firmianas se han trasladado para conferir uniformidad paisajística al nuevo arbolado de esta céntrica plaza, que finalmente tendrá 18 árboles, uno más que antes.

El delegado del Distrito Casco Antiguo, Juan Carlos Cabrera, y el director general de Parques y Jardines, Fernando Mora-Figueroa, han supervisado este jueves los trabajos de la plantación, acompañados por Ana Solvilla, la presidenta de la Asociación de Vecinos Casco Histórico-San Lorenzo, y Manuel Lucas, miembro de esta asociación.

"Se ha actuado con rapidez primero para eliminar los riesgos, máxime de cara a la gran concentración de personas que se produce en San Lorenzo durante la Cuaresma y la Semana Santa, y después para plantar el arbolado nuevo. El lunes se iniciaron los trabajos y terminarán mañana", ha argumentado el delegado.

Cabrera ha destacado que en todo momento se ha informado a los vecinos y a las hermandades de ese entorno. De hecho, se mantuvo una reunión previa con la asociación de vecinos de San Lorenzo y las hermandades del Dulce Nombre, el Gran Poder y la Soledad. "Fue una decisión urgente y sin alternativas. Los árboles de gran porte volverán a traer la sombra a la Plaza de San Lorenzo", según ha concluido el delegado de Casco Antiguo. Para estos trabajos se ha destinado un presupuesto de Parques y Jardines estimado en 20.000 euros.

EL PROCEDIMIENTO

La primera visita de inspección a la Plaza de San Lorenzo se hizo en octubre de 2019 y posteriormente se realizó una visita en altura. En las primeras semanas de febrero se adoptaron una serie de medidas para así mantener las copas "lo más funcionales posibles ante los defectos estructurales y fisiológicos". Se realizó una poda ligera con supervisión técnica del equipo de riesgo. En suma, se trataba de retirar el mínimo material fotosintético posible y se trabajaba exclusivamente en las zonas periféricas de la copa.

En ese momento, detalla que se detectó que esos 12 árboles se encontraban muy dañados. Se realizó una segunda evaluación de cada árbol con dos pruebas concretas. Por un lado, se levantó la tierra perimetralmente al cuello hasta una profundidad de 20-30 centímetros para comprobar el sistema radicular. Se realizó con azada y palaustre para no causar daño a las raíces. Por otro lado, se realizó un test de tracción manual en todos los ejemplares y se detectaron movimientos entorno al cuello y el plato raticular.

El resultado de estos trabajos fue constatar que todos los plátanos tenían el anclaje comprometido con riesgo potencial elevado, e incluso para algunos casos el anclaje era nulo.

"Se detecta movimiento significativo del plato radicular, al realizar test manual de tracción aplicando movimiento de copa. Se libera la tierra de los primeros 20-30 centímetros del alcorque y se confirma la ausencia de la mayoría de las raíces. Se intuyen cortes y posterior degradación severa de partes afectadas de prácticamente la totalidad de las antiguas raíces de anclaje. La zona aérea está afectada por grandes áreas necrosadas y chancrosas, incidencia, especialmente en los anclajes de los distintos ejes", recoge la ficha técnica elaborada por los servicios de Parques y Jardines.

Esos 12 almeces de gran porte con copas globosas permiten un encaje adecuado en el conjunto de la plaza permitiendo buena sombra, concluye.