Muchas veces, a la hora de coger un avión, se presentan situaciones que no se dan en otros medios de transporte. Los tediosos procesos para embarcar, los tiempos de espera, los largos viajes o la convivencia a bordo con otras personas pueden provocar disputas incómodas.
Es el caso de las discusiones por los reprosabrazos del avión, algo que sucede en muchas ocasiones por "la falta de empatía, de educación y porque no hay reglas establecidas sobre dónde acaba tu derecho y comienza el mío", explica a 20minutos Amelia Gómez Buchó, la subjefa de la sección sindical de STAVLA.
¿Quién tiene preferencia a la hora de usar los reposabrazos?
Aunque en la web de Skyscanner España aseguran que la norma es que la persona que está sentada en el medio de otros dos asientos tiene el derecho a usar los dos reposabrazos y a las personas de los lados les corresponde el del lado de la ventana y el pasillo, respectivamente, Gómez Buchó asegura que "no hay ninguna norma establecida". "Lo que sí está establecido es el buen comportamiento de las personas y la educación", añade.
Afirma que en el avión se ven peleas por los reposabrazos continuamente: "Hay pasajeros que han llegado a las manos". Amelia Gómez asegura que son "cuestiones de sentido común" y, ya que "los dos pasajeros tienen derecho al mismo reposabrazos, se trata de llegar a un consenso".
Solo hay que mirar las redes sociales para darse cuenta de que el problema de los reposabrazos afecta a muchos pasajeros que se sienten incómodos al ver su espacio invadido o que ironizan con la "silenciosa" pelea que se lleva a cabo en ocasiones para poner el brazo antes que el pasajero de al lado.
La mayor pelea contemporánea es por el reposabrazos en un avión de dos asientos por fila.
— Martín Alcaide (@MalcaideCR) June 24, 2018
Nunca hasta hoy había tenido que pelear tanto por conseguir mi parte de reposabrazos en un asiento de avión. He ganado. El tipo ha ido a sentarse a otro sitio. No ha hecho falta usar la fuerza. Hay trucos.
— Fernando Aramburu (@FernandoArambur) September 10, 2019
En cada fila de asientos de un avión hay 4 reposabrazos y 6 brazos. Saquen cuentas.
— Elena Baudelaire (@MissSunshine121) February 3, 2020
Necesitamos más reposabrazos.
Amelia Gómez explica que "todas las compañías tienen un protocolo de conductas conflictivas". En él se da un total de dos avisos al pasajero cuya conducta sea "inaceptable". Si continúa esa actitud, "el piloto puede decidir meterse en un alternativo" o "esperar a llegar al destino y llamar a la policía".
Las disputas tan frecuentes por algo insignificante como un reposabrazos, pueden llevar a situaciones más graves de peleas. Gómez Buchó recuerda que "una conducta conflictiva puede poner en riesgo la seguridad del vuelo".
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