En su recorrido por la planta de Fuenmayor, su presidente, Pedro Garnica, el CEO, Christian Michel, y el director industrial, Bruno Martínez, han mostrado el proceso productivo de los tableros, su tratamiento, preparación, barnizado y almacenamiento, en una planta; además de cuáles son los controles de seguridad y las medidas de prevención de riesgos que se ponen en marcha en la fábrica.

Tras conocer las fases de producción, la presidenta Concha Andreu ha felicitado a los directivos de Garnica por su planta en Fuenmayor, que este año cumple 25 años de vida del total de los 80 años de la compañía. "Es una empresa que innova, que invierte, que ha sabido transformarse a lo largo de los años para acomodarse a los nuevos tiempos, que exporta a todo el mundo la mayor parte del volumen de producción; un ejemplo y un orgullo para La Rioja".

La visita se enmarca dentro del Plan de Monitorización y Promoción de la Inversión que está desarrollando el Gobierno de La Rioja. Un plan que permitirá, mediante el contacto directo con las empresas riojanas, conocer de primera mano su situación, sus proyectos y sus necesidades con el fin de definir y orientar las políticas industriales del Gobierno de La Rioja.

Garnica, con casi ocho décadas de experiencia en la industria, exporta más del 93% de su producción a 45 países de todo el mundo y cuenta actualmente con más de 1.100 trabajadores. Tiene su sede central en Logroño y seis plantas productivas: tres de ellas situadas en La Rioja (dos en Baños de Río Tobía y una en Fuenmayor); una en Valencia de Don Juan (León), otra en Samazan (Francia) y la última adquisición Maderas de Llodio, fabricante de contrachapado de pino en el País Vasco. Recientemente Garnica ha comenzado la construcción de su séptima fábrica, que estará emplazada en Troyes (Francia) y comenzará a operar en 2021.