El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, la directora de Emakunde, Izaskun Landaida, el concejal de Cultura, Gonzalo Olabarria, la concejal de Igualdad, Nekane Alonso, el director de Azkuna Zentroa, Fernando Pérez, el autor de la pieza, Álex Rigola, y los miembros del consejo de Administración han visitado en la mañana de este martes esta instalación que "pone cara a cara con la violencia machista, buscando la empatía con todas las víctimas potenciales de esta lacra", ha explicado el centro cultural.

El proyecto, que se desarrolla en colaboración con el Área de Igualdad del Ayuntamiento de Bilbao y con el apoyo de Emakunde, está instalado en el 'Atrio de las Culturas'. Su autor ha explicado que decidió usar el conocimiento dramatúrgico para "remover y dejar una cicatriz en cada una de las personas espectadoras para que recuerden lo que está sucediendo con la violencia machista".

Rigola ha advertido de que "muchas veces dejamos pasar el machismo, chistes, comentarios o situaciones de violencia machista" y, por ello, se ha buscado "poner un espejo a la sociedad para ver si podemos cambiar un poco y podemos ser mejores".

La dramaturgia de 'Macho Man' se ha desarrollado con un equipo formado por Ferran Dordal, Alba Pujol, Irene Vicente Salas y el propio Àlex Rigola, con un enfoque centrado en las mujeres y no en los agresores.

"En una de las salas, donde el espectador está rodeado de fotografías de víctimas de violencia de género, el impacto emocional que se produce explica esta decisión: ahí, frente a la presencia de otros cuerpos que ya no están, la empatía es inmediata. El efecto habría sido distinto si se hubiera mostrado a los verdugos", han explicado desde Azkuna Zentroa.

La voz de una víctima guía a las personas visitantes por "el recorrido laberíntico de este artefacto dramatúrgico", compuesto por 12 habitaciones, que se vuelve "profundamente terrorífico porque todo lo que nos muestra es real". "Son reales los datos, las sentencias, las declaraciones y las preguntas que formula y son reales también las conversaciones y los testimonios que narran", han precisado.

El proyecto, que propone otras formas de narración a través de la fusión de artes, constituye "un viaje escénico, experimental y emocional que quiere concienciar sobre la violencia machista en la pareja, en la familia y en los entornos laboral, social y judicial".

En palabras de su director, "con este proyecto buscamos nuevas maneras de tomar conciencia de machismo extremo mediante la fusión de los conocimientos en artes escénicas, artes plásticas, psicología y documentación. Activar el público más allá de como lo haría un documental, un flyer de información o una exposición".

RECORRIDO DE 50 MINUTOS

De este modo, durante un recorrido de aproximadamente 50 minutos, grupos de seis personas, como máximo, "pasearán, leerán, escucharán e interactuarán con los objetos que vayan encontrando y con los demás participantes porque en 'Macho Man' las reacciones del público también se convierten en parte de la experiencia", han explicado desde el centro cultural.

Cada una de las salas de la instalación tiene carácter independiente y cuenta con un mecanismo de interacción propio que "obliga a estar siempre receptivo, sumando imágenes, sensaciones y vivencias que irán componiendo un todo con la finalidad de que se tome conciencia de esta lacra".

Por otro lado, 'Macho Man' se ha diseñado también como una experiencia educativa, por lo que se abrirá a centros escolares con el objetivo de "generar diálogo y reflexión" porque, según ha indicado Rigola, "la violencia machista es un problema social grave que deber desaparecer y la mejor forma para que lo haga es a través de la educación".

"Los datos de esta violencia permanente e instrumental son reveladores. De hecho, es la principal causa mortal violenta de las mujeres y el principal motivo de inseguridad para ellas", ha apuntado.

Desde Azkuna Zentroa han explicado que, al ser una instalación que contiene testimonios reales de violencia machista, "puede herir la sensibilidad de algunas personas" y no está recomendada para personas menores de 15 años.