El viernes la Consejería de Sanidad notificó 40 intoxicaciones alimentarias producidas en la Región de Murcia a consecuencia de la ingesta de pollo asado envasado al vacío producido por el grupo Sada S.A., con sede en Lominchar (Toledo). Por la tarde, La Junta de Andalucía confirrmó la existencia de diez casos en su comunidad. El sábado eran ya 48 los intoxicados en Murcia y 14 en Andalucía.

El director general de Salud Pública de Murcia, Francisco García, reiteró el sábado la importancia de que los consumidores que hayan adquirido este producto no lo utilicen por si se encuentra en mal estado y recomendó a quienes lo hayan comido que, ante cualquier síntoma, acudan al médico ya que el periodo de incubación oscila entre 10 y 48 horas.

Desde Barcelona, el director de la Agencia Catalana de Seguridad Alimentaria, Eduard Mata, pidió "precaución" y advirtió a los consumidores de que, puesto que se trata de un producto con 30 días de caducidad, "se compruebe si pertenece a algunas de estas marcas y, en ese caso, se devuelvan".

Los síntomas que han presentado todos los afectados son vómitos, dolor abdominal y fiebre, malestar general, cefaleas y dolores osteomusculares.

En Andalucía, las tres personas que permanecían ingresadas en observación en el Hospital La Inmaculada de Huércal-Overa (Almería) tras consumir estos pollos asados precocinados han sido dados de alta.

Se han detectados dos posibles casos más en Almería y otros dos en Ubeda (Jaén), si bien ninguno de ellos ha requerido hospitalización.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) se felicitó por el rigor con el que se ha actuado en el caso de estas partidas de pollo con salmonella e indicó que el consumidor tiene que tener claro que el accidente es posible.

El declaraciones a Efe, el máximo responsable de la OCU, José María Múgica, dijo que se ha actuado con rigor tanto por parte de la empresa que vende estos pollos como por parte de la administración.