Así consta en una respuesta del Gobierno a una pregunta del diputado de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, sobre si apoya el dispositivo policial y "por qué no se produjo un despliegue acorde con la posible amenaza de disturbios, dado el carácter manifiestamente agresivo de la concentración ultraderechista coincidente".

Al final de la cabalgata, el domingo 12 de enero, un grupo de personas procedentes de la concentración de España Existe se congregó en la plaza del Ayuntamiento de València para recibir a las 'magas' entre silbidos, abucheos y gritos de "traidores" y "catalanistas".

En su respuesta, el Gobierno destaca que la comisaría provincial de Valencia elaboró un dispositivo específico de seguridad para la cabalgata de las 'Magues de gener', como todos los años, y subraya que "la Policía Nacional actuó en todo momento bajo los principios de oportunidad, congruencia y proporcionalidad".

También explica que España Existe solicitó y comunicó a Delegación de Gobierno su concentración prevista en la misma plaza del Ayuntamiento donde acaba la cabalgata. Debido a la coincidencia, la plataforma trasladó a la plaza de Manises de València su acto, promovido esos días por Vox.

Esta concentración "no duró más de media hora", tras lo que las personas que la secundaron abandonaron la plaza desplazándose por varias calles de forma no organizada. En la calle san Vicente se habilitaron dos pasos para que transitaran peatones ajenos a la cabalgata, relata el Ejecutivo.

Entonces, en dos momentos puntuales, personas con banderas de España cortaron el desarrollo de la cabalgata durante unos instantes. Dos de ellos fueron propuestas para ser sancionadas por incumplir la Ley 4/2015 de protección de la seguridad ciudadana.

A la llegada a la plaza del Ayuntamiento, varios grupos de personas procedentes de la concentración de España Existe "se unían por su afinidad ideológica". Algunas de ellas sacaron banderas y algún silbato, "demostrando así su disconformidad por la celebración de la cabalgata de las Reinas Magas", según el Gobierno, lo que motivó el cordón policial para separar a afines y contrarios al evento.

En total, durante todo el dispositivo policial se identificaron a 14 personas contrarias a la cabalgata, cuatro de ellas propuestas para ser sancionadas por infringir la Ley de protección de la seguridad ciudadana.

RUFIÁN RECHAZA LA IMPUNIDAD CON LA EXTREMA DERECHA

Rufián también preguntaba al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, sobre el criterio para efectuar una detención cuando es "manifiestamente culpable de una agresión" y si "piensa tomar medidas para evitar que continúe la impunidad con la extrema derecha en las calles de València", recordando "la inactividad de las fueras y cuerpos de seguridad del Estado frente las agresiones ultras en diferentes concentraciones y manifestaciones en el País Valencià".

En su pregunta, el parlamentario del grupo Republicano lamentaba el intento de boicot a este acto festivo dedicado a la infancia. "Según testimonios gráficos en redes, la cabalgata no obtuvo casi ninguna protección policial durante la gran mayoría del recorrido (...), a pesar del conocimiento que tenía Delegación de Gobierno de la existencia de una contramanifestación de signo ultraderechista", denunciaba.

El diputado de ERC rechazaba así que "en los vídeos publicados, además de insultos e improperios constantes que dificultaban los festejos, se produjeron agresiones físicas a los organizadores por parte de los ultras sin que la Policía procediera a ninguna detención, limitándose a 'separar' a los agresores de los agredidos'".