Estos datos han sido dados a conocer en rueda de prensa en Zamudio (Bizkaia) por el director general, Carlos Alzola, quien ha destacado que 2019 ha sido un año de crecimiento "muy sólido", con unos resultados "positivos" que se han visto favorecidos por el crecimiento del negocio de aviación comercial.

La compañía, que aumentó su plantilla un 4% hasta llegar a 4.006 empleados, logró el pasado año una facturación de 983 millones, lo que supone un 11% más. El beneficio después de impuestos de la empresa se ha elevado a 95 millones, un incremento del 37%. El ebitda ha alcanzado los 105 millones, un 33% más, debido al aumento de los volúmenes de producción y el mejor rendimiento de los programas de aviación comercial

De cara a 2020, ITP, que elaborará este año su nuevo plan estratégico hasta 2025, espera unas ventas "estables" y un crecimiento "moderado" del beneficio, debido a "una moderación del crecimiento del sector de aviación comercial" y a la "ligera reducción del negocio de defensa".

Estas previsiones, según han puntualizado, no incluyen el posible impacto que la epidemia de coronavirus pueda tener en la industria aeronáutica, y han apuntado que todo dependerá de lo que se prolongue la situación. Han añadido que ITP "prácticamente no cuenta con proveedores en China y el impacto podría producirse si los aviones dejaran de volar.

(Habrá ampliación)