Esta convocatoria, que ya se ha registrado ante la Dirección General de Trabajo del Gobierno de Aragón, está dirigida a todos los trabajadores de la Comunidad Autónoma de Aragón, tanto funcionarios, como personal laboral de todos los centros de trabajo y sectores productivos.

La responsable área de la mujer CUT, María Bello, ha indicado que es una huelga laboral "consecuencia de la huelga feminista para que todas las personas trabajadoras que quieran ir a la manifestación tengan cobertura legal".

En declaraciones a Europa Press, Bello ha explicado que la finalidad es "facilitar" la participación en las actividades reivindicativas que se organicen para el 8M, que además este año cae en domingo, un día que "generalmente las necesidades laborales se cubren por mujeres", ha precisado, para poner de ejemplo los hospitales o los comercios.

María Bello ha dicho que esta convocatoria deriva de la "jornada feminista histórica" de 2018. "Es para reivindicar nuestros derechos, que se oigan, que queda camino por recorrer, pero que no estemos de brazos cruzados".

Ha precisado que es un movimiento que está enfocado a las mujeres aunque, "por supuesto" abierto a los hombres que también pueden participar favoreciendo que las mujeres de su entorno secunden la huelga general al ocuparse de las actividades que habitualmente desempeñan ellas.

"En la calle tenemos que estar nosotras", ha resumido, para apostillar que no se excluyen a los hombres. "No es hembrismo, al revés, es un movimiento feminista porque aparentemente somos iguales, pero los trabajos precarios son de mujeres y las pensiones más bajas también, además de que persiste la violencia de género", ha esgrimido.

REIVINDICACIONES

Las reivindicaciones de esta convocatoria se refieren a la mejora de las condiciones laborales de las mujeres y el fin de la desigualdad laboral mediante la consecución de la supresión de la brecha salarial y el techo de cristal, así como la igualdad en las pensiones.

En Aragón, las mujeres cobran de media un 25 por ciento menos que los hombres, y en el caso de las pensiones alcanza un 32 por ciento, han asegurado estos sindicatos.

Asimismo, exigen la promoción de la conciliación de la vida familiar y personal mediante inclusión en los convenios colectivos de medidas de conciliación que mejoren los derechos mínimos establecidos en la normativa laboral, aplicando con flexibilidad los horarios establecidos y favoreciendo la formación y promoción profesional de las personas que hayan disfrutado de sus derechos de conciliación de la vida laboral y familiar.

Han aportado el dato de que en Aragón el 92,5 por ciento de las personas que solicitan excedencia para cuidado de un familiar son mujeres.

La lucha efectiva contra las situaciones de acoso sexual en el ámbito laboral, la precariedad laboral y la alta tasa de contratos con jornadas parciales y de corta duración es otra de las reclamaciones al apuntar que en Aragón el 80,5 por ciento del trabajo a tiempo parcial esta realizado por mujeres

El listado se completa con la exigencia de la elaboración y aplicación de los planes de igualdad porque "no se están llevando a cabo" y con la reclamación al Gobierno autonómico de que promueva con los grupos de la oposición, colectivos feministas y agentes sociales un pacto contra las violencias machistas. En Aragón, existen 1.600 casos activos de violencia de género registrados policialmente y desde 2003 han asesinado a 28 mujeres.