Ambas partes se han comprometido en colaborar para "coordinar todos los medios materiales y humanos necesarios para el esplendor de los desfiles procesionales y de otras actividades religiosas a celebrar en vías públicas que se plasman en el Plan Varal", según han indicado desde el Consistorio alcalareño.

En este acuerdo también se incluye la organización de la instalación de sillas en la céntrica zona de La Plazuela, casi 1.000 asientos que se distribuirán por quinto año consecutivo en ocho sectores. Tendrán como en anteriores ediciones una clara prioridad hacia las personas mayores y ciudadanos con movilidad reducida.

La Semana Santa alcalareña, declarada de Interés Turístico, "no sólo despierta la devoción de un pueblo que la vive de una forma intensa tanto desde el punto de vista religioso como cultural, sino que se convierte cada vez más en una expresión que genera un interés creciente fuera de Alcalá", han subrayado.

Así, presenta "todo un abanico de expresiones singulares y auténticas que sólo se pueden encontrar la ciudad y que se manifiesta en las particularidades de cada hermandad", han dicho desde el Ayuntamiento desde donde han destacado también sus elementos como la subida al Monte Calvario, la saeta alcalareña, la Judea, las 'Sibilas' o el recorrido por lugares emblemáticos como el Convento de Santa Clara o la residencia de mayores de la Milagrosa o por calles de especial dificultad para los costaleros.

Como novedad, este año contará con el estreno de la estación de penitencia de la Tercera Palabra ya como hermandad, muestra de que esta tradición sigue creciendo.

Asimismo, la colaboración entre el Consejo de Hermandades y el Ayuntamiento sigue siendo igualmente estrecha para materializar nuevos proyectos en pro de Alcalá de Guadaíra y su cultura, como el Museo de la Semana Santa de la ciudad, cuyo edificio ya está cedido y funciona como sede del Consejo de Hermandades.

El emplazamiento de este museo está, acorde con la importancia patrimonial y devocional cofrade, en la principal arteria de la zona centro en la calle Nuestra Señora del Águila, entre la plaza del Duque y Cervantes.

"Se trata de una iniciativa que requiere de coordinación, preparación y detalles como todo lo referente al patrimonio religioso", han añadido los responsables municipales, aunque ya se sabe que el futuro Museo de la Semana Santa contará con exposiciones permanentes sobre el patrimonio de sus hermandades y en Cuaresma se centrará en su historia, obra gráfica y pictórica generada por escritores, fotógrafos y pintores.

Además de sus elementos de gran valor artístico, tendrán cabida muestras de la gastronomía, ritos, artesanía, bordado e imaginería de las distintas hermandades.