Así lo ha avanzado el consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, durante su visita a la Delegación de León para entregar medallas a los empleados públicos de la provincia.

Ibáñez ha calificado "de hito pionero" este texto y ha reconocido que supondrá "un cambio de cultura" en el que el principal objetivo no es otro que "centrarse directamente en las personas, independientemente de su sexo".

En este sentido, ha confirmado "la decidida colaboración" con la Dirección General de la Mujer y ha subrayado que se ha tratado de encontrar "un consenso" a través de las organizaciones sindicales y los demás implicados en este Plan de Igualdad.

Ello ha permitido incluir 60 medidas "vertebradas en ocho ejes" y que dejan patente el compromiso de la Junta de Castilla y León para que "sea efectiva" entre los empleados públicos de la institución autonómica.

El consejero de Presidencia ha reconocido que Castilla y León "quiere liderar y ser impulsora en igualdad" y ha adelantado la necesidad de contar con "un ejercicio permanentemente de diagnóstico actualizado" y por ello inicialmente tendrá una vigencia de un año este Plan.

Además, en su visita a León ha destacado que trata de conocer "las necesidades más importantes" que se pueden tomar en cuenta desde la Junta de Castilla y León "para mejorar y adoptar las medidas pertinentes".

Todo ello acompañado del delegado en León de la Junta de Castilla y León, Juan Martínez Majo, donde ha entregado 60 medallas a los funcionarios que han cumplido 30 años de trabajo público y que, a su juicio, "son el engranaje que permite funcione la administración".