Varias decenas de padres que han tenido a sus hijos por gestación subrogada en Georgia y Ucrania han reclamado este domingo ante el Ministerio de Justicia que se otorgue pasaporte español a los menores y así tengan los mismos derechos, por ejemplo a sanidad y educación, que niños gestados por el mismo método en otros países.

La Plataforma por la Protección de la Infancia Nacida en Georgia y Ucrania (Apingu) ha convocado este domingo una concentración frente al Ministerio en la que un grupo de padres ha pedido, con sus bebés, que se derogue la instrucción aprobada hace un año que no permite que esos menores tengan pasaporte español, por lo que viven en España con el documento georgiano o ucraniano.

Debido a eso estos padres no pueden matricular a sus hijos, algunos con 10 ó 12 años, en centros escolares públicos, y dependiendo de la región tienen copago farmacéutico o sanitario, han denunciado.

Estas familias consideran "ilegal" y "caprichosa" la citada instrucción dictada por la entonces ministra Dolores Delgado, que supone una "injusticia" para sus hijos con respecto a otros nacidos por gestación subrogada en países como Estados Unidos o Canadá, que sí llegan de allí con pasaporte español, según ha explicado una madre que ha hecho de portavoz, Ilanit Snir.

Piden que se anule esa directriz y se suspendan cautelarmente sus efectos de manera que los menores puedan ser inscritos como españoles, como ocurre con los niños que nacen por la misma técnica en países en los que sí hay una regulación con España.

"Del derecho a la inscripción del recién nacido penden el resto de derechos de los menores, que al volver a España con una nacionalidad que no les corresponde tienen tratamiento de extranjeros, hasta que juez de España, tras procesos legales que pueden durar años, dictamine que son claramente españoles", ha explicado Snir.

Ha precisado que al ser oficialmente extrajeros no pueden matricularse en colegios públicos y "dependiendo de las comunidades autónomas hay familias que se enfrentan a copago sanitario o farmacéutico".

"Es una desprotección muy fuerte, a pesar de que estamos amparados por el ordenamiento jurídico nacional e internacional y es el Gobierno de España el que, adoptando una postura ideológica y radical, se está jugando una multa por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que ya ha multado a Francia en varias ocasiones" por hacer lo mismo, ha añadido.

Los padres de los menores nacidos en Georgia y Ucrania consideran que desde el Gobierno actual de PSOE y Podemos, "que dice que defiende los derechos de todos", se practica, en cambio, "un odio y persecución" a estas familias que en los casos de los niños más mayores se traduce en acoso porque "están señalados".

Ha precisado que se trata de "una ideología personal" de "algunos miembros del Gobierno, y "no de ningún partido".

La portavoz de los padres ha recordado que hay familias que siguen en Georgia o Ucrania a la espera de recibir a su hijo, y otras lo seguirán haciendo.