El reino prohibido es el título de la última película de Jackie Chan, el largometraje que unirá por primera vez en pantalla al conocido actor de artes marciales y a su compañero de profesión Jet Li.

El argumento gira en torno a un joven neoyorquino (Jet Li) que siente una pasión irrefrenable por el típico cine de Kung Fu y que tras encontrar en una casa de empeños de China Town un bastón mágico del Rey mono, comenzará una cruzada para liberar a su dios prisionero por unos "malvados".

Jackie Chan, que interpreta al maestro borracho, ha tenido que someterse a largas sesiones de maquillaje de siete horas que para Chan resultaban frustrantes, según comenta en la entrevista: "son un desafío a la paciencia".

El actor asegura también que, si él hubiese dirigido la película, "no la habría hecho así" ya que no refleja fielmente la cultura asiática. Sin embargo acepta que está hecha para un público occidental y que para ellos sí resulta divertida. Además, puede ayudar a que la gente se interese por nuestra civilización y yo "quiero que se sepa más sobre la cultura asiática".

Lo más divertido para Chan: los combates con Jet Li, en los que ambos se ponían a prueba mutuamente y demostraban los rápidos que pueden llegar a ser, tanto que a veces les pedían que lucharan más despacio.