Paz Padilla ha vuelto a ponerse al mando de Sálvame tras el fallecimiento de su madre el pasado 11 de febrero. La presentadora, visiblemente emocionada, le ha dedicado unas bonitas palabras en el programa, que arrancaba con la imagen en blanco y negro de la gaditana, ya en el plató, junto a una fotografía familiar.

"Buenas tardes, bienvenidos. Quiero dar las gracias a todos los que han estado conmigo y a los que han estado con ella. A mis jefes de Telecinco, a mis compañeros, a los de La que se avecina... A todos ustedes, que me mandasteis mensajes por Instagram, no pude contestaros", ha dicho con la voz entrecortada.

Paz Padilla, desolada, es arropada por los suyos tras la muerte de su madre

El plató, en absoluto silencio, continuaba escuchando a la presentadora: "Estaba pasando por uno de los momentos más duros de mi vida. Me emociono porque es mi madre. Muchos me decíais que era mayor, pero cuando se va una madre, se te rompe el alma", ha apuntado Padilla, sin poder contener las lágrimas. 

La conductora del espacio de Mediaset ha contado que se encuentra bien tras el duro golpe: "Estoy fuerte. Ella me enseñó que la felicidad es gratis. Ella quiso vivir hasta el último instante. Decía: 'Tiene guasa tener que irse con lo bien que se está aquí'", ha dicho, a lo que ha añadido: "El amor de la familia está por encima de todo. Mi mamá siempre va a estar porque su esencia sigue viva". 

"Mi mamá siempre va a estar porque su esencia sigue viva"

La de Cádiz, con una sonrisa, ha confesado que la despedida de Dolores Díaz fue emocionante: "Te he despedido de forma muy alegre, fue un día precioso. Suena raro, pero lo fue. Aquí estamos tus hijos con ganas de vivir. Te recordaré siempre. Te quiero muchísimo, mamá. Nos reencontraremos algún día", ha añadido. 

Finalmente, Paz Padilla ha querido dedicarle este jueves el programa a su madre: "Tú amabas este programa y por eso te lo quiero dedicar", ha apuntado, tal y como ya había anunciado en su cuenta de Instagram: "El Sálvame de hoy se lo quiero dedicar a ella, por lo mucho que disfrutaba cada tarde viéndolo, y porque muchas veces he trabajado pensando en lo feliz y orgullosa que estaba de mí", reza su última publicación. 

Doña Lola, como la llamaban en los platós de Mediaset, falleció el pasado 11 de febrero en la ciudad de Cádiz, a la edad de 92 años. Siempre se mostró orgullosa de su hija, llegando a conectar en directo con el programa de corazón cuando su presentadora fue designada para dar las campanadas en Nochevieja.