La mujer asesinada en Moraira estuvo en el sistema de protección VioGén del que salió antes de producirse los hechos

Concentración en Valencia por el asesinato de la mujer en Moraira.
Concentración en Valencia por el asesinato de la mujer en Moraira.
EUROPA PRESS
Concentración en Valencia por el asesinato de la mujer en Moraira.
Arthur Karvink, holandés de 59 años, entra encapuchado en la inmobiliaria de su propiedad. Ha sido colaborador. Se entregó y explicó como mató a Alina y donde.

La mujer asesinada y localizada en un contenedor soterrado en Moraira (Alicante) este lunes estuvo dentro del sistema de protección VioGén para mujeres que sufren violencia de género, pero había salido ya de ese sistema cuando se produjeron los hechos.

La víctima fue localizada el pasado lunes 17 sobre las 08.00 horas dentro de un contenedor en la calle Móstoles por operarios del servicio de limpieza de Teulada-Moraira, aunque, según han informado fuentes conocedoras de los hechos este miércoles, la víctima fue degollada y depositada en el contenedor en la madrugada del sábado 15 al domingo 16.

El presunto autor de los hechos, su pareja sentimental, un holandés de 59 años, se entregó en la Comandancia de la Guardia Civil este lunes tras descubrirse el cadáver y confesó los hechos.

La subdelegeda del Gobierno en Alicante, Araceli Poblador, ha señalado, a preguntas de los medios por una sentencia en la que absolvió al presunto autor, que la víctima, de 36 años y nacionalidad rumana, estuvo en Viogen pero que "en el momento de producirse el asesinato ya no había ninguna orden de protección porque ya no estaba en vigor esa orden".

"Son decisiones judiciales en las que no voy a entrar ahora, si se tomó en su momento es porque se entendió que era oportuno", ha insistido la subdelegada.

Poblador, en la concentración de repulsa celebrada a las puertas de la Subdelegación en Alicante, ha incidido en que se trata del primer asesinato por violencia de género en la Comunidad Valenciana, y que la cifra se eleva a 11 mujeres asesinadas en toda España desde el inicio del año. Por ello, ha exigido que "toda la sociedad" debe implicarse porque de lo contrario "no acabaremos nunca".

La subdelegada acude a la concentración de condena convocada por el Ayuntamiento de Teulada-Moraira, que ha decretado este miércoles como día de luto oficial.

Un juzgado absolvió de maltrato al acusado 

Un juzgado de lo Penal de Benidorm (Alicante) absolvió el pasado mes de octubre de un delito de maltrato al detenido por matar a su pareja el pasado domingo en Teulada-Moraria por falta de pruebas después de que la víctima se acogiera a su derecho a no declarar en el juicio. Tampoco quiso interponer denuncia contra su compañero en el momento de los hechos, en junio de ese mismo año.

Aunque el detenido no tenía actualmente en vigor ninguna orden de alejamiento sobre la víctima, si bien sí existe un antecedente de su paso por los juzgados, a raíz de unas diligencias urgentes abiertas en julio del pasado año por un delito de maltrato de obra cometido presuntamente contra su pareja, según el TSJCV.

El juzgado incoó la causa tras recibir un atestado de la Guardia Civil después de que un vecino alertara a la Policía Local de Teulada, que se personó en la vivienda de la pareja en la madrugada del 30 de junio. Sin embargo, la víctima no quiso interponer denuncia contra su compañero e hizo uso de su derecho a no declarar contra él.

Igualmente, la magistrada del JVSM adoptó una orden de protección a favor de la mujer que incluía como medidas cautelares la prohibición de que el investigado se comunicara por cualquier medio o se acercara a menos de 300 metros de ella.

El caso fue elevado al juzgado de lo Penal 2 de Benidorm y el juicio oral por estos hechos se celebró el pasado 19 de septiembre de 2019. En la vista, la víctima volvió a acogerse a su derecho a no declarar contra el acusado, que fue absuelto de un delito de malos tratos del artículo 153 del Código Penal por falta de pruebas.

En la sentencia, fechada el 11 de octubre de 2019, no quedó acreditado que el hombre hubiera golpeado a su pareja en la cara durante una discusión, ya que únicamente existían testigos de referencia, no directos, y su valor probatorio es limitado, de acuerdo con la jurisprudencia del Tribunal Supremo (TS).

El juzgado también tuvo en consideración la declaración de otro testigo, un amigo del acusado, que manifestó que este había dormido en su casa la noche de los hechos. La sentencia absolutoria no fue recurrida, por lo que devino firme por providencia en diciembre de 2019 y, por consiguiente, quedaron sin efecto las medidas cautelares adoptadas contra el acusado.

Desde la Guardia Civil se ha considerado "muy improbable" que el detenido pase este miércoles a disposición judicial y se ha subrayado que el caso está bajo secreto de sumario.

Concentración en Valencia

Por su parte, la Delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Gloria Calero, ha insistido, desde la concentración de repulsa celebrada en Valencia, en que el caso "está ya declarado como violencia de género" y que está bajo secreto de sumario.

"Esto de la violencia de género es un tema muy complejo porque las mujeres tardan más de ocho años en atreverse a denunciar", ha lamentado Calero que ha apuntado que "parece ser que tenía una denuncia de alejamiento por los vecinos que denunciaron" porque oyeron "escándalo" en la vivienda que compartía la pareja. En cualquier caso, ha recalcado que el caso "ya estaba sobreseído".

Defensa del Pacto de Estado

En el transcurso de las concentraciones se han leído un manifiesto en el que se ha denunciado que la violencia de género "más brutal y cruel" se ha ensañado "con una mujer y con su hijo" que "sufrirá las consecuencias de este asesinato".

Se ha recordado a las 11 víctimas registradas en estas ocho semanas de 2020 y a las 1044 contabilizadas desde que existen registros, de las que 132 son valencianas.

Cifras que ponen de manifiesto "una realidad que no se puede normalizar ni banalizar", una violencia "estructural" sobre la mitad de la población que impide "la plena libertad, igualdad y seguridad de las mujeres" y de "sus hijos e hijas", y que no puede erradicarse "sin abordar las actitudes sociales que la toleran o justifican", de modo que han reclamado como "necesario" impulsar medidas "preventivas y de sensibilización".

Asimismo se ha defendido el Pacto de Estado como instrumento "integrador" y se ha situado la violencia de género como un asunto "prioritario" de la agenda política.

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