Según una nota de prensa de la Comisaría gijonesa, fueron agentes de la brigada de Seguridad Ciudadana quienes detectaron en el barrio del Llano a tres jóvenes que cambiaron de dirección tras detectar la presencia de los coches policiales e intentaron camuflar una mochila que llevaban.

Ante las sospechas de la Policía, los agentes les siguieron a corta distancia, lo que hizo que los jóvenes se pusieran muy nerviosos y acelerasen el paso.

Los agentes les pidieron en ese instante que les mostrasen el contenido de sus mochilas, a lo que descubrieron que llevaban numerosos productos, bebidas, dulces, y artículos de baño que ellos mismos admitieron haber sustraído en supermercados del barrio.

Los tres iban sin su documentación personal, por lo que fueron identificados en Comisaría, donde se comprobó que tenían 18 años y que uno de ellos contaba con antecedentes por hechos similares.

Fruto de la investigación, se puso averiguar que cada uno de ellos había actuado en un comercio diferente para no levantar sospechas y se habían llevado alcohol, refrescos, dulces y queso, así como algún producto de baño, para montar una fiesta con amigas.

Los jóvenes fueron denunciados como supuestos autores de un delito leve de hurto, por estar los efectos sustraídos valorados en unos 150 euros.