A pesar de que finalmente ni Antonio Banderas ni Almodóvar y su Dolor y gloria se llevasen los premios de interpretación masculina y película internacional ni Penélope Cruz, que entregó el segundo de estos galardones, repitiera su famoso grito. A pesar de que, aún habiendo hecho una carrera (de premios) espectacular, Klaus no consiguiese vencer a la todopoderosa Pixar y su cuarta Toy Story en animación. Y a pesar de que Twitter se volvió algo loco con el ya célebre momento de Gisela cantando en la gala, la presencia de España en los premios Oscar no se quedó ahí: quedaban Mar Flores y Paz Vega.

La modelo y la actriz estuvieron en Los Ángeles anoche y asistieron a una de las numerosas fiestas que se celebran tras los Premios de la Academia y que, además, es de las más reconocidas e importantes. Y, además de nuevo, la de uno de los galardonados.

Sir Elton John, que se llevó la estatuilla a Mejor canción original por I'm Gonna Love Me Again, el tema que ha creado junto a su letrista de toda la vida, Bernie Taupin, para el biopic sobre su vida, Rocketman, todos los años organiza una Academy Awards Viewing Party. Es decir, una fiesta.

Lo hace a través de su institución contra el SIDA: la Elton John AIDS Foundation. Y muchísimos de sus amigos y amigas de la jet set de Hollywood se acercan y pasan la noche después de la gala.

Este año, tras desfilar por la alfombra roja del Dolby Theatre, rostros famosos como los de Donatella Versace, Dita Von Teese, Sharon Stone, Heidi Klum, Anne Heche o Caitlyn Jenner se dejaron ver por allí. Pero también, claro está, los de Flores y Vega.

La diseñadora y modelo ya llevaba unos días en California y sus seguidores conocían sus rutinas gracias a las stories y las fotografías que subía a su Instagram, en las que se dejaba ver, por ejemplo, maquillándose y arreglándose en The Beverly Hills Hotel.

Eso sí, como no hizo acto de presencia en el photocall previo a la party, se dedicó a grabar vídeos desde el interior de la propia celebración. Y hasta captó la entrada del anfitrión, que no solo llegaba tan discreto como suele, sino con su Oscar bajo el brazo.

Quien sí que se esperaba que asistiera a alguna de las celebraciones postgala, dado que ha vivido muchos años en Los Ángeles y tiene gran multitud de amigos en Hollywood, es Paz Vega, que acaba de cumplir 44 años.

La actriz sevillana optó por un vestido con la espalda al aire, muy brillante. En ese sentido se parece al elegido por Mar Flores, solo que el de la modelo de 50 años era una creación de Malne, la firma de Paloma Álvarez y Juanjo Mánez, plateado y de escote sugerente y el de la intérprete jugaba con el negro y rosa, el escote era cerrado y era del diseñador Georges Hobeika.