Las legumbres también tienen su propio día internacional, el 10 de febrero. Y para dar un poco de difusión a estos alimentos tan poco valorados, hemos seleccionado unas recetas que, además, incluyen también verduras para conseguir platos aún más completos. Si compramos legumbres de calidad ya cocidas, o tenemos la previsión de dejarlas a remojo con tiempo, podemos preparar comidas o cenas riquísimas sin complicarnos demasiado.
Las personas poco amigas de las legumbres siempre pueden optar por consumirlas de otra forma. El hummus o los patés vegetales son muy fáciles de preparar, mantienen todas las propiedades y pueden resultar mucho más apetecibles. Se pueden servir como picoteo o como crema untable para los bocadillos de la oficina o el cole.
Las legumbres deberían formar parte de nuestra dieta diaria y existen muchas maneras de prepararlas. Los clásicos como potajes, lentejas, habas con jamón, fabadas, etc. siempre nos parecerán una opción perfecta para comer legumbres y verduras en un mismo plato pero, como no siempre tenemos el tiempo para prepararlos, hemos pensado en algunas recetas que se hacen en poco tiempo, están muy buenas y cumplen su papel de comida sana.
Alubias con espárragos trigueros
Los salteados se preparan de forma rápida y quedan buenísimos. Estas alubias con espárragos trigueros se hacen en muy poco tiempo, y si las preparamos como proponemos, con una mezcla de tomates cherry y anchoas, le vamos a dar un toque muy especial a este plato que siempre funciona.
Garbanzos con calabaza y setas
Aprovechando que seguimos en plena temporada de setas y que las calabazas están en su mejor momento y a muy buen precio, rescatamos la receta de estos garbanzos con calabaza y setas. Sabores de invierno que van perfectos con los garbanzos (aunque con alubias también funcionaría perfectamente). Si añadimos bacalao desmigado, unas cuantas especias y lo acompañamos con un poco de pan integral, vamos a tener el tupper más equilibrado de la oficina.
Ensalada de garbanzos con vinagreta de albahaca
Y las ensaladas no tienen por que ser solo de lechuga. Para muestra, esta ensalada de garbanzos que, además, lleva una vinagreta de albahaca que está riquísima. Aunque la hemos preparado con pimientos, cebolleta y atún, hay margen para la imaginación y podemos tunearla a nuestro gusto cambiando ingredientes o añadiendo alguna verdura más que tengamos por casa. Eso sí, no podemos olvidarnos de la vinagreta porque le da la vuelta por completo a este sencillo plato.
Lentejas rojas con espinacas al curry
Desde que probamos estas lentejas rojas al curry, las hemos preparado muchísimas veces. Han pasado a ser uno de esos platos habituales en nuestro menú. El resultado de esta combinación es buenísimo y se prepara de forma muy rápida. Las lentejas rojas tienen que cocinarse un poco previamente (solo 10-15 minutos porque no tienen piel y se hacen rápido), pero podemos usar las lentejas ya cocidas que más nos gusten. Eso sí, siempre aconsejamos que, siendo las protagonistas, sean de la mejor calidad posible.
Lentejas con pollo, espinacas y kimchi
Otra versión de lentejas exóticas que demuestra que se pueden hacer muchas más cosas que las de siempre con chorizo son estás lentejas con pollo, espinacas y kimchi. El kimchi es un tipo de col fermentada típica de Corea, que se popularizó por aquí hace un tiempo y ya podemos encontrar en casi cualquier sitio. Estas lentejas son el típico plato que empezó -como pasa muchas veces- intentando salvar una comida con las cosas que teníamos por casa y que acabó por posicionarse entre nuestras recetas favoritas.
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