La Fiscalía Superior de Cataluña investiga al presidente del Parlament, Roger Torrent, en unas diligencias que abrió en noviembre pasado por desobediencia al Tribunal Constitucional (TC), tras permitir que se votara en el pleno una moción sobre la autodeterminación.

Según ha adelantado este viernes el periódico El Mundo y han confirmado fuentes jurídicas, la Fiscalía Superior abrió en noviembre de 2019 diligencias a Torrent por desobediencia, por no acatar la orden del Constitucional que le impedía tramitar resoluciones que apelaban al derecho de autodeterminación.

Por el momento, la Fiscalía Superior de Cataluña no ha recibido ninguna notificación respecto de la decisión del Constitucional del pasado martes, 28 de enero, cuando acordó deducir testimonio ante el Ministerio Público para que informe de si Torrent incurrió en un delito de desobediencia al admitir a trámite el 22 de octubre una propuesta que reiteraba la autodeterminación y la reprobación de la monarquía.

Según las fuentes consultadas, si la Fiscalía General del Estado remite este caso a la Fiscalía Superior de Cataluña se podría acumular esta denuncia a las diligencias que Torrent ya tiene abiertas por desobediencia desde noviembre del pasado año.

Ciudadanos denunció entonces a Torrent ante la Fiscalía de Cataluña por "consumar un delito de desobediencia" al permitir la votación de la moción sobre la autodeterminación en el pleno del pasado 12 de noviembre.

Aquel día, el Parlament aprobó una moción en la que expresaba su "voluntad de ejercer de forma concreta el derecho a la autodeterminación" y, casi en paralelo, el Constitucional acordó anular la admisión a trámite de esta resolución y advirtió a Torrent del riesgo de desobediencia.

La moción, una iniciativa de la CUP, se aprobó gracias al apoyo de JxCat, ERC y los anticapitalistas. Los Comunes se abstuvieron, mientras que Ciudadanos -que abandonó el hemiciclo-, PSC-Units y PPC no participaron en la votación.