En un comunicado, explican que han tomado esta decisión ante el "silencio" de la Generalitat al no haber anunciado ninguna medida para depurar responsabilidades ni haberse pronunciado sobre la posibilidad de personarse como acusación particular contra Iqoxe.

Por ello, los grupos municipales de la CUP del Camp de Tarragona presentarán mociones en sus ayuntamientos, con matices en función de si están cerca del complejo petroquímico, que piden depurar responsabilidades, mejorar protocolos, aumentar los controles sobre los efectos nocivos de la industria química en el medio ambiente, en la salud y la seguridad de la población, y endurecer la legislación en lo relativo al control ambiental, medidas de seguridad y condiciones laborales del sector.

La moción también pedirá la diversificación del modelo económico en el Camp de Tarragona para que no dependa solo de la industria petroquímica: "Mientras que en otros países de tradición industrial se ha hecho una transición económica hacia la 'química verde', la investigación aplicada y se ha alejado la industria peligrosa de los núcleos urbanos, en el Camp de Tarragona la dirección es contraria", ha señalado la concejal de la CUP en Tarragona, Laia Estrada.

El concejal de Som Poble en La Canonja, Oriol Olivé, ha abogado por mejorar los canales de comunicación con la población y garantizar que la información llegue ágilmente a la población y sepan cómo actuar en caso de emergencias.

"Hay que apostar por modelos económicos que pongan la salud y el bienestar de las personas en el centro, que no pongan en riesgo ambiental y de seguridad a la población y a la clase trabajadora, y que promuevan la economía social y solidaria", ha destacado la diputada de la CUP en el Parlament Natàlia Sànchez.