De las calles a la Moncloa en seis años

Iglesias promete como vicepresidente y Unidas Podemos tendrá cuatro ministros en el nuevo Gobierno de Pedro Sánchez
Iglesias posa antes de entrar al primer Consejo de Ministros, el pasado martes.
EFE
Iglesias promete como vicepresidente y Unidas Podemos tendrá cuatro ministros en el nuevo Gobierno de Pedro Sánchez

El 17 de enero de 2014, hace exactamente seis años, Pablo Iglesias presentaba en el madrileño Teatro del Barrio el manifiesto Mover Ficha junto a los entonces anónimos Íñigo Errejón, Juan Carlos Monedero o Teresa Rodríguez, entre otros. Ese escrito sirvió para dar el pistoletazo de salida a Podemos, una marca por entonces desconocida que en mayo dio la campanada al conseguir un 8% de los votos y cinco eurodiputados en la Eurocámara, casi igualando los seis de IU.

Seis años después, Podemos ha llegado al Gobierno central como socio minoritario en un pacto de coalición con el PSOE. Lejos queda el plan original del "asalto a los cielos" y el tan ansiado sorpasso a los socialistas, que la formación morada rozó con los dedos en 2016 en alianza con IU. De hecho, las tres últimas citas electorales se han traducido en fuertes pérdidas de apoyos para Unidas Podemos.

Pero, pese a todo, Iglesias ha marcado un hito en su hoja de ruta al acceder a la Moncloa como vicepresidente segundo, consiguiendo que una formación a la izquierda del PSOE esté en el Consejo de Ministros por primera vez desde la II República.

Por el camino han quedado una parte muy importante de los cofundadores de Podemos, entre ellos los tres que, junto a Iglesias y Juan Carlos Monedero, conformaron la primera cúpula morada: Íñigo Errejón, Carolina Bescansa y Luis Alegre, todos alejados ya del partido por discrepancias con la línea seguida por Iglesias. También la exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, que precisamente cofundó junto a Errejón el proyecto Más Madrid.

El partido, además, cruzó su particular rubicón en el congreso de Vistalegre II, donde el nivel de enconamiento entre las corrientes pablista y errejonista llegó a su máximo y que terminó con una aplastante victoria de Iglesias, que se tradujo en la imposición de su línea política y la ganancia de poder de sus afines, simbolizada en el ascenso a la portavocía parlamentaria de la ahora ministra de Igualdad, Irene Montero.

Hoy, la situación interna es mucho más tranquila, y Podemos debe afrontar ahora su nuevo papel como partido de Gobierno. El debate de cómo hacerlo es, precisamente, el que tendrá su dirección en la reunión que mantendrá este viernes. Aunque Iglesias se ha adelantado recuperando su perfil más tranquilo para el Gobierno. Lejos del asalto, toca cohabitación.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento