La renovación de Albia de Castro, con aceras más amplias y aparcamiento en espiga, estará lista para el mes que viene

La renovación de la calle Albia de Castro, que contempla la ampliación de sus aceras y la instalación del primer aparcamiento en espiga que va a haber en Logroño, estará finalizada para el próximo mes de febrero. Las obras se iniciaron el pasado 7 de octubre, contando con un presupuesto cercano a los 274.000 euros.
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Así lo ha avanzado este martes el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero, quien, esta mañana, ha visitado los trabajos junto al Instituto Hermanos D'Elhuyar junto al edil de Participación Ciudadana, Kilian Cruz-Dunne, y algunos vecinos del entorno.

Como ha apuntado Caballero a los medios de comunicación, con esta obra, que se inició el pasado mes de octubre, "el Ayuntamiento de Logroño mejora la accesibilidad, amplía las aceras, pone en marcha un aparcamiento en línea y otro aparcamiento en forma de espiga invertida en la calle Albia de Castro, en su tramo comprendido entre la calle Milicias y la Avenida de Jorge Vigón".

En este sentido, el edil ha recordado que va a ser el primero de este tipo de estacionamientos que se van a hacer en Logroño, con un modelo, ha asegurado, "que aumenta la seguridad". A ello ha sumado, además, que, en esta remodelación, también se está renovando el alumbrado público, la red de agua potable y amplía el colector de aguas pluviales.

LAS OBRAS, AL DETALLE.

Los trabajos que se están realizando en esta calle consisten "en la ampliación de la anchura de las aceras existentes a 5 metros, que inciden en la eliminación de barreras arquitectónicas".

Igualmente, se incidirá en "la creación de las orejas para mejorar la seguridad vial y accesibilidad en la intersección con los pasos de peatones". Caballero ha detallado que "se deja un único carril de circulación norte-sur y se añade un itinerario ciclista a contraflujo".

Contará "con un aparcamiento en línea y un aparcamiento en forma de espiga invertida en ambas márgenes de la mitad sur del tramo que comprenden las obras". "En este tipo de aparcamiento, los vehículos quedan orientados hacia el sentido de la vía, lo que obliga a aparcar marcha atrás y a salir mirando hacia la calzada", ha explicado.

Las obras supondrán una "importante mejora para la zona y el desarrollo urbano de esta calle, a la que se dota de nuevas redes de redes de alumbrado público y de agua potable", según el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero.

También se renueva el alumbrado público, con nueva canalización subterránea y con mejora del nivel de iluminación existente; así como la red de agua potable de microcemento; se amplía el colector de aguas pluviales.

Por último, se renueva la señalización horizontal y vertical de la calle y se mejora el mobiliario urbano, contando con nuevas papeleras, bancos y jardineras.

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