Según han señalado este lunes en nota de prensa desde la patronal, su propuesta mejoraba "sustancialmente" las condiciones económicas y los beneficios sociales para el convenio colectivo del comercio minorista. Sin embargo, siempre desde la versión de la patronal, las mejoras no han sido consideradas desde la parte sindical, "rompiendo así el acuerdo para negociar fijado en su día y que por tanto no se ha podido llevar a término".

Unas mejoras económicas que, han indicado, suponían ofertadas por alcanzar un salario anual de 14.000 euros en 2021. "A ello, hay que sumar una serie de beneficios sociales, que se añaden a los ya existentes, como vacaciones, aumento del período de lactancia, subrogación de la plantilla en caso de cambio de titularidad de las empresas, así como la no pérdida de festivos cuando coincidan en vacaciones", han afirmado desde Asupa.

A ello, han añadido este lunes incrementar los salarios otro 2,5% en 2022 y otro tanto en 2023, y en ambos casos con cláusula de revisión del IPC, así como un día más de libre disposición. "La nueva propuesta tiene como objetivo el consenso y beneficio para las partes y se formula pese a la reducción del margen operativo de las empresas, fruto de la huelga convocada durante el mes de diciembre que supuso notables pérdidas económicas para las mismas", han explicado desde la patronal.

Por todo ello Asupa ha señalado que si persiste la "negativa sindical a negociar puesta hoy de manifiesto", se vería obligada a retirar su propuesta inicial, "al tiempo que adelanta que la actual situación podría traducirse en la ausencia de viabilidad de algunas de las empresas y afectar de manera significativa al crecimiento y sostenibilidad del empleo en el sector".