Los Bomberos de la Generalitat han realizado entre las 20 horas del jueves y las 00.30 horas del viernes un total de 39 salidas para atender los incidentes provocados por las fuertes lluvias que han caido en algunas zonas de Catalunya.

Las comarcas de Barcelona y las de Girona han sido las más castigadas, con inundaciones de bajos, desperfectos en el mobiliario urbano y caida de árboles.

Según informó el Cuerpo en un comunicado, actuaron en ocho ocasiones en Manlleu (Barcelona) revisando varios bajos inundados, entre ellos el del hospital de la localidad, así como toda la avenida Roma. También tuvieron que extraer agua de los bajos del número 45 de la calle Vilamirosa y del número 12 del paseo Puig.

Del mismo modo, inspeccionaron los bajos de una vivienda y del bar de la estación de Renfe en Vic, y sacaron agua de dos viviendas de Gurb y de un taller en Sant Quirze de Besora (Barcelona). En Balenyà (Barcelona), cayó un relámpago en un poste de luz en la carretera BV-5303.

Y en Girona...

En la provincia de Girona los Bomberos trabajaron en Camprodon, con siete salidas, especialmente por inundaciones en locales y bajos, y al quedar un tramo en obras del paseo Maristany lleno de tierra, que tuvo que ser cortado preventivamente.

También en esta demarcación, en Ribes de Freser realizaron tareas de inspección de plantas bajas en calles donde se había acumulado mucha agua, y en Llanars actuaron al caer un cable eléctrico frente a una casa en la Font de'n Rafel.