María Jesús Montero será la nueva portavoz del Gobierno de coalición, el que también seguirá siendo ministra de Hacienda. Sustituye en el puesto a Isabel Celáa, que hasta ahora también era ministra de Educación y Formación Profesional y que, como la mayor parte del Ejecutivo en funciones, se encuentra a la espera de confirmar si continuará en el nuevo equipo de Pedro Sánchez.

Fuentes de Moncloa han confirmado este jueves las nuevas competencias de Montero, que días atrás ya sonaba como la candidata más fuerte para ser la portavoz del nuevo Gobierno de coalición, en cuya negociación ha tenido un papel muy importante.

Negociadora de la coalición

Montero ha sido una de las interlocutoras en las últimas semanas por parte del PSOE para alcanzar con Unidas Podemos un pacto de coalición. De la misma manera, ya tuvo un papel importante en el pasado mes de julio, cuando formó parte del equipo negociador que entonces integraron la vicepresidenta, Carmen Calvo, y la portavoz socialista en el Congreso, Adriana Lastra. Incluso cuando los contactos ya parecían totalmente frustrados y parecía inevitable la convocatoria de nuevas elecciones, como así terminó siendo, Montero hizo un último intento junto al líder de IU, Alberto Garzón, para intentar salvar, sin éxito un acuerdo, que en noviembre, tras el 10-N, sí dio sus frutos. Como resultado, un gobierno de coalición en el que Garzón también será ministro, de Consumo.

Continúa en Hacienda, según lo previsto

Montero sustituirá a Celáa como portavoz en un Ejecutivo en el que conservará una de las carteras más importantes, considerada de Estado, la de Hacienda.

En ella, a Montero le corresponderá dar respuesta a uno de los compromisos que Sánchez antes quiere llevar a cabo: preparar un proyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado 2020, que, según las intenciones del presidente, el Consejo de Ministros debería aprobar ya en este mes de enero para ser aprobados definitivamente por el Congreso en el primer trimestre del año.

En realidad, Montero tiene buena parte del trabajo ya hecho, según indican en Hacienda, puesto que la base de las cuentas para este año serán los Presupuestos de 2019 que no fueron aprobados por el Congreso. 

De buen trato con la prensa, a la ministra de Hacienda y nueva portavoz del Gobierno le ha costado ocultar no solo sus ganas, sino la aparente seguridad de que continuaría en el Gobierno al frente de la elaboración de las cuentas. Su subconsciente la traicionó el pasado mes de noviembre, cuando el día en que fue a acreditarse en el Congreso como diputada tras el 10-N se descubrió hablando ante la prensa de la elaboración de los Presupuestos para este año "a la mayor brevedad posible".