No habían pasado ni dos horas de la toma de posesión de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno cuando su homóloga en la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, hizo una declaración pública para declarar que el Ejecutivo que preside sería "un dique de contención" frente al pactado por el PSOE y Unidas Podemos, que calificó como "radical de izquierdas" y dirigido "en la sombra" por independentistas catalanes.

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La presidenta madrileña compareció este miércoles tras el primer Consejo de Gobierno del año junto al vicepresidente y portavoz, Ignacio Aguado, pero ninguno de ellos dio cuenta de los acuerdos alcanzados en sus intervenciones.

Ambos dirigentes pusieron de manifiesto su temor que el futuro Ejecutivo central cargue de alguna manera contra las políticas liberales y la economía de Madrid.

Díaz Ayuso se mostró especialmente preocupada por la aprobación de un nuevo sistema de financiación autonómica porque cree que esconde la eliminación de la legislación madrileña sobre los impuestos del patrimonio. Además, afirmó que el Gobierno PSOE-Unidas Podemos quiere suprimir las libertades para elegir centro educativo y sanitario, así como la colaboración público privada "que tan buenos resultados está dando en Madrid y es orgullo de España", según opinó.

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"Pretenden dinamitar la política económica de libre mercado y de bajada de impuestos, incluso interviniendo en la propiedad privada con normativas de imposición de precios de alquiler", aseveró la presidenta regional.

En caso de que se diera alguno de estos "ataques contra la libertad", incidió Díaz Ayuso, "serán respondidos convenientemente con todos los recursos a nuestro alcance", y citó expresamente a "tribunales y parlamentos". "Vamos a defender un modelo que consideramos que es un éxito", se sumó Ignacio Aguado, que opinó que el futuro Gobierno de Pedro Sánchez "está más preocupado por los territorios que por las personas".

Otra de las batallas a librar durante los próximos meses la representarán los 431 millones de euros que, según el Ejecutivo PP-Cs, el Estado adeuda a Madrid. Fuentes de la Consejería de Hacienda señalaron este miércoles que de los 1.237 millones que correspondían a la región de la financiación autonómica del año pasado, ya se han recibido 679, y los 127 que corresponden al Consorcio Regional de Transportes. La última transferencia, abundaron, llegó el pasado 30 de diciembre.

Parte de los 431 millones que exige la Comunidad han sido reclamados en los tribunales y no es descartable que se siga el mismo camino con alguna otra partida pendiente.

En el plano económico, otro de los hitos de este 2020 será la elaboración de los presupuestos. De momento, el Ejecutivo PP-Cs no pone fecha a para ponerse con el proyecto. Cuando se retrasó su redacción, el pasado septiembre, esta se fio a la formación de un Gobierno central que enviara una previsión de ingresos a cuenta de la financiación autonómica.