"Después de meses de inmovilismo ahora se abre una oportunidad de avanzar y reforzar el posicionamiento de la agenda balear en el ámbito estatal", ha expresado la Ejecutiva del partido ecosoberanista este martes en un comunicado después de que Sánchez haya salido elegido en segunda votación.

En este contexto, MÉS ha confiado en que el nuevo Gobierno permita iniciar las negociaciones para elaborar unos nuevos presupuestos que acaben la prórroga de las cuentas aprobadas por el PP. "La aprobación de estas nueve cuentas serán capitales para Baleares", han considerado.

De hecho, según han explicado, el acuerdo firmado por MÉS con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) continúa vigente con el compromiso por parte de ERC de incluir tres puntos de partida que son "irrenunciables" para el archipiélago.

Éstos son la revisión del modelo de financiación -incluyendo el desarrollo del REB, especialmente la parte fiscal-, el convenio de movilidad sostenible que permita implantar el tren de Llevant y el tranvía de Palma, además del convenio para financiar infraestructuras de depuración y abastecimiento de agua.

MÉS per Mallorca se ha comprometido a "tejer" además, complicidades con "las fuerzas verdes, ecologistas, progresistas, de izquierdas y soberanistas que tienen representación al Congreso de los Diputados". "Solo desde esta visión plurinacional se hará realidad la consecución de nuestras aspiraciones", han dicho.

"Nunca antes ningún diputado lo ha hecho y como muestra solo hay que recordar ha estado Compromís, con quien seguiremos colaborando, quién ha reclamado la mejora de la financiación balear al debate investidura", han argumentado.

Con este nuevo escenario, MÉS también ha confiado en que el nuevo Ejecutivo cnetral "retire todas las cuestiones de inconstitucionalidad" presentadas a Leyes baleares, "así como respete la política lingüística desplegada por Govern e, incluso, haga una pasa más en defensa del plurilingüismo del Estado".

La Ejecutiva de MÉS también ha acordado mostrar la "repulsa" y "condena" por la supuesta campaña de acoso promovida para intimidar los diputados que habían anunciado su voto favorable a la investidura.

"Nos preocupa la actitud de los partidos de la derecha que durante los últimos días han hecho un llamamiento abierto al transfuguismo para agrietar una mayoría progresista", han criticado.