En una nota de prensa, ha lamentado que, mientras en Madrid los líderes de Podemos "apostaron por tender la mano y buscar el acuerdo", en el Principado "concibieron la negociación como sinónimo de imposición" con el objetivo de "doblar el brazo a los socialistas".

El acuerdo nacional, ha señalado, permitirá "avanzar en la dirección correcta" de "crecer y progresar sin dejar a nadie atrás". "Este acuerdo confirma que cuando hay voluntad, el pacto es posible", ha apostillado.

Sin embargo, la dirección de Podemos en Asturias "ha optado por situarse en las antípodas" en la negociación presupuestaria e instalarse en una "estrategia de bloqueo que provoca desconcierto en su electorado y la euforia en una extrema derecha que ya ha logrado imponer su agenda a PP y Ciudadanos". Con esta estrategia, ha enfatizado, Podemos pretende en Asturias "boicotear cualquier acuerdo para culpar a la FSA-PSOE".

El acuerdo en Madrid deja "en una delicada posición" a la dirección de Podemos en Asturias, según Llamedo, quien recuerda que la formación morada en las últimas elecciones perdió la mitad de sus escaños "y sigue postergando sine die una reflexión sobre el papel que quiere jugar en los próximos años".