El objeto del plan, que afecta a un radio de 250 metros alrededor de la iglesia, es la regulación de los elementos y espacios que integran el entorno de protección, así como la conservación de su imagen histórica.

De esta forma, el plan pretende ordenar el ámbito del conjunto declarado BIC con un régimen más restrictivo que el establecido en el Plan General de Ordenación (PGOU).

Según ha recordado el Consistorio, entre las principales características de este plan destaca que se mantienen la mayoría de edificaciones existentes, restringiendo su sustitución, y se desautoriza el incremento de altura y número de plantas de las edificaciones existentes.

En los casos de sustitución de inmuebles, se debe mantener el número de plantas siempre que esté por debajo de las cuatro permitidas por el PGOU.

Además, se determinan para las parcelas una altura y número de plantas de acuerdo con la media del tramo de calle donde se sitúan y se reduce la edificabilidad permitida por el PGOU en el ámbito, de 9.111,20 metros cuadrados de techo lucrativo a 7.053,90 metros cuadrados.

A partir de su aprobación, se abrirá un periodo de información pública durante 30 días en el que el expediente quedará a disposición de los interesados para presentar las alegaciones que se consideren pertinentes.

Según el Consistorio, la Concejalía de Urbanismo ha trabajo de forma "intensa" en los últimos meses para sacar adelante el Plan Especial de Protección de la iglesia de Sant Antoni, lo que permitirá desatascar licencias urbanísticas de esta zona de la localidad.